Nike Pegasus 41: análisis y review

Hemos probado las Pegasus 41 hasta su límite, y estamos convencidos de que es una opción fantástica para:

• Las personas que acaban de empezar en el running que buscan unas zapatillas para correr a diario que sean fiables y versátiles para carreras cortas, medias e incluso largas.
• Los fans de las Pegasus que se van comprando el modelo nuevo cada año, ya que seguro que esta actualización les parece fantástica.
• Los corredores que consideren que la anterior mediasuela React carece de retorno de energía, ya que apreciarán el rendimiento mejorado de la nueva espuma ReactX.
• Los talonadores en busca de unas zapatillas de entrenamiento diario asequibles, resistentes y fiables.

Hemos sometido a las Pegasus 41 a muchas pruebas y, basándonos en los resultados obtenidos, creemos que no son la mejor opción para algunos corredores.

En concreto, la amortiguación de estas zapatillas y el elevado drop las hacen menos adecuadas para los corredores de metatarsos, a los que dicho diseño les puede parecer incómodo para su estilo de carrera. A esos corredores les recomendamos considerar alternativas como las Saucony Ride 17 o las Hoka Clifton 9, que proporcionan más amortiguación en el antepié.

Además, creemos que las Pegasus 41 pueden decepcionar a los que prefieren una experiencia de carrera ligera. El peso de este modelo puede resultar incómodo, sobre todo para los corredores acostumbrados a los pares más ligeros.

En el laboratorio hemos comprobado que competidoras como las ASICS Novablast 4 o las New Balance FuelCell Rebel v4 presentan un diseño más ligero con un precio similar. Estos modelos están diseñados para una experiencia protagonizada por su poco peso, aunque con menos resistencia, lo que creemos que los hace mejores opciones para los corredores que buscan comodidad sin el volumen.

Uno de los aspectos que menos nos gustaban de las Pegasus 40 era su tendencia a calentarse un poco debido a la densidad de su parte superior. Sin embargo, cuando sacamos de la caja por primera vez esta actualización, nos quedó claro que Nike había solucionado este problema. Los orificios de ventilación son ahora prominentes en toda la parte delantera, que es una señal prometedora, aunque todavía teníamos que confirmar su eficacia aquí en el laboratorio.

Comenzamos nuestras pruebas con la máquina de humo y descubrimos una clara mejora; con una puntuación de 4/5, se han llevado 1 punto más en ventilación con respecto a la v40 (3/5).

Utilizando una luz, también examinamos cómo Nike ha refinado la estructura de ventilación de estas zapatillas. Hemos comprobado que han apostado por la transpirabilidad en la parte delantera y han reforzado la estructura en otras zonas, como el mediopié, el talón e incluso la punta. Esto debería mejorar la estabilidad y la resistencia.

Nuestra atención se centró entonces en la parte delantera, principal responsable de la excelente ventilación. Para ver de cerca esos diminutos orificios, encendimos nuestro microscopio.

Pudimos ver la malla de ingeniería y sus numerosos orificios, que facilitan la salida del aire caliente y la humedad. Aunque hay una capa negra debajo de estos agujeritos, es lo suficientemente fina como para no entorpecer demasiado el flujo de aire.

Sin duda, sin esa capa subyacente, las zapatillas podría haber obtenido una puntuación perfecta de 5/5 en ventilación en nuestra prueba. Sin embargo, eliminarla pondría en riesgo la comodidad y la resistencia, unos sacrificios que no estamos dispuestos a hacer en unas zapatillas de entrenamiento diario.

Después de confirmar su óptima transpirabilidad, ahora es el momento de evaluar si la parte superior de malla de ingeniería también proporciona al menos una resistencia media. Al principio no estábamos seguros de que la malla fuera a aguantar por a sus numerosos orificios de ventilación, la verdad.

¡Pero lo consiguió! Aunque la malla blanca desapareció, que es lo que habíamos previsto, la capa negra secundaria permaneció intacta, obteniendo un 3/5 en nuestra evaluación. Esto es tranquilizador, ya que la mayoría de los corredores esperan que sus Pegasus aguanten no solo para correr, sino también para múltiples actividades una vez terminados sus días de running.

Otro aspecto que suele preocupar a muchos corredores en términos de durabilidad es el acolchado del talón, que a veces puede degradarse tras unas pocas carreras.

Sin embargo, creemos que esto no será un problema con las Pegasus 41. Con una puntuación de 4/5 en nuestra segunda prueba Dremel, es muy poco probable que sufra daños antes de tiempo en esta zona.

Centrando nuestra atención en la icónica suela exterior tipo gofre, que es un diseño que sigue en auge desde la patente de Bill Bowerman en 1974, empezamos evaluando la dureza del compuesto de caucho.

Con una dureza de 89,0 HC, Nike claramente no corrió riesgos en esta parte de las zapatillas. Aunque no es excelente, la tracción es suficiente, lo que sugiere que el caucho más duro también debería proporcionar una buena resistencia. Esa es nuestra hipótesis, ¡vamos a comprobar si es cierta!

En nuestra tercera y última prueba Dremel, aumentamos las revoluciones de la herramienta hasta 10.000 para poner a prueba el caucho.

El resultado nos dejó medianamente satisfechos. Para ser sinceros, dada la dureza del caucho, esperábamos una resistencia ligeramente superior. Sin embargo, la presencia de una hendidura de 0,9 mm confirma que debería tener una vida útil decente, incluso cuando se utiliza en una mezcla de asfalto, senderos fáciles o caminos de grava.

También hemos comprobado el grosor del caucho y, con 3,0 mm, no debería plantear ningún problema. Es una elección de diseño común que se ajusta muy bien a lo que consideramos unas zapatillas de running "estándar" después de 41 ediciones.

Durante nuestras pruebas de uso, las Pegasus 41 no nos parecieron demasiado pesadas, y sentimos que estaban a la par con la edición anterior y otros modelos del estilo. Más tarde lo confirmamos en la báscula, que mostró un peso justo por debajo de 281 g, lo que supone un pequeño aumento con respecto a sus predecesoras.

Aunque consideramos que se trata de un peso decente, no es fantástico ni mucho menos, sobre todo teniendo en cuenta que en el mercado existen actualmente muchas zapatillas de entrenamiento diario que ofrecen características similares pero con un peso mucho menor. Creemos que hay margen de mejora en este aspecto para las Pegasus del año que viene.

Las zapatillas de running no han dejado de crecer y, en los últimos dos o tres años, todavía no hemos visto una actualización que reduzca significativamente la altura de la suela. En su lugar, la tendencia es aumentar la altura de las zapatillas y adoptar un enfoque maximalista en muchos modelos de uso diario.

Las Pegasus 41 siguen esta tendencia, añadiendo más de 3 mm para alcanzar una altura del talón de 33,6 mm. Sigue siendo una cifra muy estándar que funciona bien para los talonadores, ofreciendo una protección sustancial incluso para los maratonianos que buscan unas zapatillas para carreras largas. Incluso así, siguen sin pertenecer a la categoría maximalista.

El antepié mide solo 22,2 mm, lo que puede no ser suficiente para los corredores de metatarsos. Exceptuando a los más ligeros entre ellos, que puede que prefieran una pisada más natural sin mucha amortiguación.

Aunque pensamos que los corredores de metatarsos pueden disfrutar de las Pegasus 41 para carreras fáciles de hasta 15K, los que planeen atreverse con distancias más largas podrían considerar las Nike Vomero 17. Incluso nos referimos a ellas como las "Pegasus Premium" porque incluyen mejores materiales y una capa de espuma ZoomX, además de una suela más alta en esta zona... y un precio más alto, también.

Siempre medimos el drop de acuerdo con los estándares establecidos por la World Athletics, y descubrimos que el drop real de las Pegasus 41 se mantiene en el extremo superior del espectro con 11,4 mm, siendo solo ligeramente superior a los 10 mm que Nike afirma. La verdad es que estamos contentos con una discrepancia tan pequeña.

Descubrimos que la plantilla tiene un grosor de 5,1 mm, lo que aumenta la suavidad general de las zapatillas, haciendo que sean más mullidas y que la sensación sea más lujosa en comparación con las anteriores Pegasus.

Hablando de sensación de lujo, la característica más destacada de las Pegasus 41 es la introducción de la espuma ReactX, que ya habíamos visto en las InfinityRN 4 pero que ahora debuta en la serie más vendida de Nike.

¿Qué tiene de especial esta espuma? Básicamente, es una versión refinada de la React que es más blanda, tiene más rebote y, según Nike, es más sostenible. Aquí, en el laboratorio, nos han gustado mucho estas mejoras, sobre todo porque React estaba empezando a estar un poco anticuada en comparación con la mayoría de las competidoras.

Para conocer de verdad lo blanda que es esta espuma ReactX, cortamos las zapatillas por la mitad y descubrimos que, con un resultado de 15,8 HA en nuestro durómetro, coincidía con nuestras impresiones iniciales. Es más blanda que la espuma React de las Pegasus 40, que obtuvo un resultado de 17,6 HA, aunque no por mucho.

No obstante, para nosotros es un cambio positivo, ya que estas zapatillas también devuelven más energía en cada zancada, aunque sin llegar a los niveles de la ZoomX.

Otra característica clásica de la serie Pegasus es la tecnología Air Zoom, que ha sido un elemento básico durante más de una década y se repite en la versión 41 con dos unidades, una en el talón y otra en el antepié.

Aunque no marcan una diferencia significativa con respecto a la espuma en sí, desde luego tampoco le restan rendimiento a las zapatillas. Las Air Zoom rinden con fiabilidad y aguantan para siempre, pero no son tan reactivas como las unidades de las Alphafly 3.

Aunque la ReactX ofrece varias mejoras con respecto a la React, descubrimos que su rendimiento a bajas temperaturas no es una de ellas. En nuestras pruebas de laboratorio, las Pegasus 40 se volvieron un 19,1 % más firmes tras pasarse 20 minutos en el congelador, mientras que la v41 se endureció un 37,1 %.

Ya hemos mencionado antes que se trata de unas Peg excepcionales para los talonadores, y el rocker que hemos descubierto no hace más que confirmarlo. Se trata, sin duda, de la suela más curvada que Nike ha diseñado para unas Pegasus, con un notable talón biselado y un rebote más pronunciado de la parte delantera.

No nos malinterpretes, sigue siendo un modelo que ofrece una pisada clásica y natural, nada que ver con las Hoka Cielo X1. Sin embargo, en nuestra opinión, los que aprecian las zapatillas de running con rocker que les ayudan a lanzarse hacia delante al aterrizar con el talón probablemente piensen que estas son las mejores Pegasus hasta la fecha, sin lugar a dudas.

Además de la mejora de la espuma ReactX, otra mejora significativa de las Pegasus 41 respecto a la mayoría de sus predecesoras es la estabilidad, especialmente para los talonadores.

Desde el principio, nos pareció que este modelo ofrecía mucha más sujeción que las versiones anteriores, lográndolo a través de cambios sutiles que comentaremos en un momento, y algunas mejoras interesantes como los laterales de la mediasuela y la guía del mediopié en la suela exterior.

Gracias a la ranura longitudinal que recorre toda la suela exterior, la rigidez torsional de las Pegasus 41 se mantiene baja, incluso con la incorporación de unos milímetros extra de espuma en la mediasuela. Se han llevado un 2/5 en esta prueba.

Por el contrario, el contrafuerte del talón experimentó un cambio significativo. El de las Pegasus 40 se llevó un 2/5, pero el de las Pegasus 41 ha conseguido un 4/5. Este ajuste pretende claramente cambiar un poco de comodidad por una mayor estabilidad, similar a lo que Adidas consiguió con las Supernova Rise, beneficiando especialmente a los talonadores.

Si los contrafuertes de talón rígidos tienden a irritarte el tendón de Aquiles, es posible que prefieras un modelo con un talón ultra flexible como las On Cloudsurfer 7.

Las Pegasus 41 son notablemente más grandes en comparación con sus predecesoras, un cambio que mejora positivamente la estabilidad de las zapatillas. Ahora cuentan con una base de aterrizaje más ancha adecuada para todos los corredores, independientemente de su tipo de pisada.

Al medirlas, en el antepié nos dio 115,6 mm, lo que las sitúa en la misma clase que la serie Vomero, conocida por su diseño más ancho.

Si había algún inconveniente significativo para los talonadores en las Pegasus, era la estrechez del talón, que ahora se ha solucionado eficazmente.

Con 89,2 mm, la anchura del talón es ahora realmente comparable a la de la mayoría de las zapatillas de running, ofreciendo un diseño muy estándar en esta zona, aunque las zapatillas mantienen su agilidad.

A pesar de su diseño con más rocker, durante nuestras pruebas de uso descubrimos que las Pegasus 41 siguen ofreciendo una experiencia de carrera clásica, en gran parte debido a su flexibilidad. El diseño de la suela exterior solo requirió una fuerza mínima de 19,2 N para doblarse hasta los 90 grados en nuestro laboratorio.

Estamos encantados con este resultado. En una época en la que algunas zapatillas de entrenamiento diario se han vuelto muy rígidas, es refrescante ver que algunos modelos tradicionales de este estilo siguen proporcionando comodidad bajo los pies, fomentando la fuerza del pie y siendo adecuados para actividades cotidianas además del running.

Basándonos en nuestros hallazgos iniciales con la espuma, teníamos pocas expectativas para esta prueba y, desafortunadamente, estábamos en lo cierto.

Al volver a evaluar la rigidez después de otros 20 minutos en el congelador, observamos un aumento del 40,4 %, que es excesivo y probablemente hará que las zapatillas se vuelvan más rígidas para las personas que corren en temperaturas muy frías.

Además de la mejora de la espuma ReactX, otra mejora significativa de las Pegasus 41 respecto a la mayoría de sus predecesoras es la estabilidad, especialmente para los talonadores.

Desde el principio, nos pareció que este modelo ofrecía mucha más sujeción que las versiones anteriores, lográndolo a través de cambios sutiles que comentaremos en un momento, y algunas mejoras interesantes como los laterales de la mediasuela y la guía del mediopié en la suela exterior.

Se dice mucho que las zapatillas de Nike son muy estrechas, pero esa tendencia empezó a cambiar ya desde hace unos años. Por suerte para ti, en el laboratorio vamos más allá de las especulaciones y medimos meticulosamente cada modelo. En este caso, descubrimos que las Pegasus 41 tienen 101,4 mm de ancho en la zona más ancha de la parte superior, que no está nada mal.

Sin embargo, también debemos advertirte de que la parte delantera de las Peg 41 ahora es un poco más baja, por lo que los que prefieran las zapatillas con mucho espacio vertical podrían no estar contentos con este cambio.

Por el contrario, los corredores que prefieren un ajuste más seguro probablemente estén contentos con este cambio.

Es imposible hablar sobre la parte delantera en su totalidad con una única medición, por eso nosotros hacemos otra más. Esta segunda medición se centra en la zona del dedo gordo, donde hemos observado que las Pegasus siguen estrechándose de forma bastante agresiva, como es habitual.

Si quieres un modelo con una parte delantera ultra espaciosa y con forma de pie, te recomendamos las Altra Torin 7. Por otro lado, las Brooks Glycerin 21 ofrecen un diseño ligeramente más ancho en la parte delantera, pero aún así medio.

Aunque a menudo encontramos zapatillas con un precio superior a los 150 € con una lengüeta que se mueve de un lado a otro y nos vuelve locos en nuestras pruebas de uso, estamos encantados de confirmar que las Pegasus 41 cuentan con una lengüeta reforzada.

Este diseño asegura su sujeción a los laterales, mejorando notablemente el ajuste de las zapatillas, por lo que no nos molestó ni siquiera a ritmos rápidos. ¡Otro punto a favor para este par!

Aunque a menudo encontramos zapatillas con un precio superior a los 150 € con una lengüeta que se mueve de un lado a otro y nos vuelve locos en nuestras pruebas de uso, estamos encantados de confirmar que las Pegasus 41 cuentan con una lengüeta reforzada.

Este diseño asegura su sujeción a los laterales, mejorando notablemente el ajuste de las zapatillas, por lo que no nos molestó ni siquiera a ritmos rápidos. ¡Otro punto a favor para este par!

Al fin y al cabo, el objetivo de las Peg es satisfacer a todo el mundo, y la mejor manera de hacerlo en unas zapatillas de running es añadiendo la cantidad justa de acolchado en la lengüeta.

Eso es exactamente lo que Nike ha conseguido. Con 6,6 mm de acolchado en una sola placa de espuma, nos pareció que proporciona una amortiguación ideal incluso para los que se atan los cordones con fuerza de Hulk. También nos gustó que tuviesen un poco menos de acolchado que sus predecesoras y sus 8,6 mm, que nos parecieron un poco excesivos.

Descubrimos que las Pegasus 41 mantienen el mismo diseño en el talón de Aquiles que los modelos anteriores, como las Pegasus 40, marcando un año más sin tirador en el talón.

Pudimos quitarles la plantilla y, gracias a la horma estándar de este modelo, la sustituimos fácilmente por unas plantillas de recambio.

Para nosotros, conseguir un sobresaliente en todas las categorías también significa incluir elementos reflectantes, y las Peg 41 lo consiguen con tres piezas reflectantes: una interior y dos exteriores.

Sería fácil para la marca pasar por alto estos pequeños detalles y ahorrarse un poco de dinero en cada par, como la famosa historia de las aceitunas de American Airlines, pero creemos que esa decisión no hubiese sido la mejor.