Las 7 Las Mejores Superzapatillas del 2025

Las ASICS Metaspeed Sky Tokyo nos demostraron que son imbatibles tanto en nuestras pruebas de uso como de laboratorio. Cuando salimos a correr con ellas, su estructura ligera hizo que fuésemos incluso más rápido, cosa que también le debemos a su espuma propulsora y a la placa de carbono. Además, su amortiguación es tan cómoda que suavizó cada aterrizaje. Con todo esto y más, las Metaspeed Sky Tokyo consiguieron llevarse el oro como las mejores superzapatillas.

Nuestros pies pueden confirmar que este modelo de running es potente como él solo, pero quisimos poner su nivel de explosividad en números: un sólido 78,5 % en el talón y un 78,2 % en el antepié, que son unos de los resultados más altos que hemos analizado. Además, tienen una placa de carbono plana en la mediasula, mejorando tanto la reactividad como la estabilidad en cada paso.

Para distancias exigentes como los maratones, las Metaspeed Sky Tokyo nos ofrecieron mucha protección contra los impactos gracias a su enorme mediasuela de 38,7/32,7 mm. En las pruebas de absorción de impactos, se llevaron unos resultados altos de 147 SA en el talón y 122 SA en el antepié, ofreciéndonos suavidad en cada aterrizaje y haciendo que pudiésemos conservar energía para el tramo final de cada carrera.

Incluso ofreciéndonos la máxima velocidad y comodidad, es increíble cómo estas ASICS consiguen tener una estructura tan ligera. Sus 163 g las hacen un 23,5 % más ligeras que la media de las superzapatillas que hemos analizado en nuestro laboratorio, marcando una diferencia importante en agilidad y comodidad.

Sin embargo, su talón estrecho de 75,0 mm y su bajo drop de 6,0 mm hacen que los aterrizajes sean inestables para los talonadores. Estos corredores deberían priorizar las superzapatillas que beneficien, o que al menos no se opongan, a su técnica natural.

Creemos que las PUMA Fast-R Nitro Elite 3 son unas de las zapatillas más agresivas que existen. En nuestras pruebas de laboratorio,  comprobamos que son rápidas hasta decir basta y es que muy pocas de sus rivales pueden igualar esta velocidad. Con su espuma de última generación, su estructura ligera y el nuevo diseño de su placa, su eficiencia a la hora de correr quedó reflejada en todos nuestros datos. Eso sí, cuando las analizamos también vimos que son muy, pero que muy inestables, además de que su mediasuela dividida en dos zonas (desacoplada) y lo frágiles que son sus materiales en general hacen que estas PUMA sean poco prácticas para la mayoría de los corredores.

Las Nike Streakfly 2 tienen una estructura muy ligera y van a toda velocidad, así que correr con ellas es una experiencia única. Sus características nos recuerdan a los modelos de atletismo, así como su impulso y su conexión con el suelo. A todo esto se suman los resultados de nuestras pruebas de laboratorio, donde verificamos que son las mejores superzapatillas para 5K y 10K.

Decimos que se sienten como unas zapatillas de atletismo por su mediasuela baja, que es de 27,0/23,3 mm. Nos deja sentir totalmente el suelo bajo los pies con su amortiguación mínima y su bajo drop de 3,7 mm, pero son menos duras con los pies gracias a su amortiguación reactiva.

Cuando analizamos su retorno de energía, nuestra máquina marcó un 76,3 % en el talón y un 77,9 % en el antepié, ofreciendo una potencia inagotable y un fuerte impulso hacia adelante. La curvatura en la zona del antepié nos impulsó incluso más, sobre todo cuando aterrizamos en su óptimo.

Su estructura, que es ligera como una pluma, potencia su agilidad. Solo pesan 128 g, así que se sienten totalmente barefoot, sobre todo porque la mediasuela se dobla sin pensárselo dos veces. De hecho, en nuestra prueba de flexibilidad, vimos que eran un 54,2 % más flexibles que la media.

Minimalistas por naturaleza, la parte delantera de estas zapatillas es estrecha y bajita, así que el volumen de la zona de los dedos de estas Nike es bajo. Los corredores a los que les incomode que la malla les roce los dedos deberían echarle un ojo a otra cosa.

Las Saucony Endorphin Elite 2 hicieron que las nubes bajasen a las calles combinando altura, suavidad y una potencia en una estructura ligera. Los resultados de nuestras pruebas de laboratorio confirman lo que nuestros pies sintieron: las EE2 tienen la espuma más blandita de todas las superzapatillas que hemos analizado hasta el momento.

Es difícil encontrar una mediasuela que pueda igualar a la de las EE2. Alcanza una impresionante altura de 39,9/32,4 mm y cuenta con espumas de doble densidad. Nuestro durómetro mostró que ambas espumas son bastante más blanditas que la media, con 6,5 HA y 4,0 HA. Además, cuando medimos su absorción de impactos, nuestra máquina marcó unos resultados sobresalientes de 157/123 SA. Al superar a la media en estas dos pruebas, estas Saucony nos demostraron que son cómodas hasta decir basta.

La amortiguación IncrediRUN no solo es blandita, ¡sino que también está llena de vida! Cuando analizamos su retorno de energía, nuestra máquina marcó un 80,6 % en el talón y un 82,1 % en el antepié, lo que demuestra que estas zapatillas son muy potentes. La mediasuela trabaja codo con codo con la placa de carbono para impulsarnos hacia adelante sin descanso.

Consolidando su estatus de superzapatillas, las EE2 presumen de una estructura muy ligera. Incluso con lo altas que son, pesan 197 g, que es un 7,5 % menos que la media de las superzapatillas que hemos analizado.

Eso sí, tal y como esperábamos, la espuma mullida de estas Saucony hace que los aterrizajes sean inestables. Solo podemos recomendarles este modelo a los corredores experimentados con una técnica adecuada.

Nos quedamos boquiabiertos cuando las Nike Alphafly 3 consiguieron combinar velocidad y comodidad a la perfección, pero lo más increíble es que destacan en las distancias largas gracias a su energía inagotable y a su espuma, que reduce la fatiga. Nuestras pruebas de laboratorio nos dieron la razón, ya que son las mejores superzapatillas de running que hemos analizado hasta la fecha.

Este modelo eleva el rendimiento al siguiente nivel, así que pudimos correr a toda pastilla y llegar a donde quisiésemos. Están llenas de energía, y esto se lo debemos a la mediasuela ZoomX y a sus Air Pods en el antepié. Cuando analizamos la reactividad de las Alphafly 3, vimos resultados altísimos: un 74,9 % en el talón y un 73,9 % en el antepié. La rígida placa FlyPlate es como un trampolín, impulsándonos hacia adelante y mejorando la estabilidad.

La espuma ZoomX es como un salvavidas para las piernas, con una mediasuela más alta que la media: 38,1/29,6 mm. Proporciona la amortiguación necesaria para las carreras de fondo, como nos demostró con los maravillosos resultados que consiguió en nuestra prueba de absorción de impactos: 144 SA en el talón y 113 SA en el antepié. Esto nos ayudó a conservar la energía para los últimos kilómetros de nuestras carreras, que siempre son muy duros.

Pero el upper también se merece nuestras palabras bonitas, con su ligero Atomknit 3.0, que no se siente restrictivo y evita que termines con las uñas negras. El flujo de aire es estupendo, y como se llevaron un 5/5 en transpirabilidad, no tuvimos que lidiar con rozaduras ni ampollas. Además, su estructura ligera de 201 g hace que cada paso sea como un soplo de aire fresco... ¡Literalmente!

Es una pena, pero el caucho Fast Shot se desgasta muy rápido, ya que tiene un grosor de solo 1,9 mm y es un 181,8 % más propenso al desgaste que la media. Si esto es un factor decisivo, te recomendamos buscar unas superzapatillas que te puedas poner para varios maratones.

Las Saucony Endorphin Pro 4 nos han demostrado que están listas para competir, pero donde realmente destacan es en lo comodísimas que son para ser unas superzapatillas. En vez de centrarse únicamente en el rendimiento, ofrecen una sensación más relajada y espaciosa. Además, nos sorprendió que su diseño favoreciese tanto a los talonadores, ya que su fantástica durabilidad hace que sean una opción excelente para los maratonianos que corren en el medio o al fondo del pelotón. Para nosotros no se trata simplemente de un par para competir, sino que también es ideal para entrenar largas distancia. Eso sí, que ahora pesen más y que tengan una geometría más conservadora a lo mejor no les hace mucha gracia a los corredores que estén buscando el máximo rendimiento.

Las Adidas Adizero Adios Pro 4 son rápidas, pero no son agresivas para los pies. Nuestras pruebas de laboratorio confirman su alto retorno de energía, y eso que no sacrifican ni su flexibilidad ni toda la protección que les ofrecen a las piernas. Estas zapatillas revolucionarias son sorprendentemente ligeras, y su comodidad inigualable las convierte en nuestra principal recomendación para principiantes.

El poderío de este modelo hace que esté listo para competir, y nuestra prueba de retorno de energía lo confirma con unos resultados espectaculares: un 80,4 % en el talón y un 80,3 % en el antepié. Los despegues fueron pan comido, ya que las AAP4 pesan solo 200 g, que es un 6,5 % menos que la media de los modelos de competición.

Su flexibilidad hace que sean cómodas para los principiantes, y es que en nuestra prueba de 30 grados necesitaron solo 22,7 N de fuerza para doblarse, así que son unas de las superzapatillas menos rígidas que hemos analizado. Esta flexibilidad se consigue gracias al ingenioso diseño de las Energy Rods 2.0. En lugar de tener la mítica placa de longitud completa, estas zapatillas cuentan con 5 varillas con infusión de carbono que imitan la anatomía del pie para proporcionar reactividad sin ser demasiado rígidas.

Cada aterrizaje viene de la mano con una amortiguación estupenda. Nuestra prueba de absorción de impactos nos demostró que estas Adidas están listas para absorber los golpes, ya que obtuvieron un par de resultados altos: 142/117 SA.

Eso sí, ten en cuenta que los aterrizajes con el talón serán inestables, ya que sus 80,4 mm lo hacen estrecho. Este modelo es ideal para los corredores de mediopié y de metatarsos.