Las 7 Mejores Zapatillas De Running Para Carreras De 5K Y 10K del 2024

Las Nike Vaporfly 3 marcan claramente un antes y un después en el mercado con su mezcla perfecta de comodidad, velocidad y ligereza. Son nuestras número 1 para las carreras de 5K y 10K por su reactividad, amortiguación y potencia. Nuestros pies y los resultados del laboratorio lo tienen claro, estas zapatillas están diseñadas para ganar.

Las pruebas de fondo son muy difíciles, pero las Vaporfly 3 las hacen más llevaderas y agradables gracias a su amortiguación. Su suela de 37,1/26,0 mm hace que cualquier corredor pueda enfrentarse a todos esos kilómetros cómodamente. La mediasuela ZoomX se siente blanda y con rebote, asegurando así que la energía no se acabe. Cuando la analizamos con nuestro durómetro, vimos que era un 20,0 % más blanda que la media.

Nuestra prueba de flexión revela la impresionante rigidez de la FlyPlate, que tiene una resiliencia un 95,5 % mayor que la media, aumenta la velocidad con un esfuerzo mínimo. Esta es la cifra que buscamos para batir nuestras marcas personales, y la verdad es que nos encanta cómo las V3 mantienen nuestra energía corriendo de una forma tan eficaz.

Su parte superior Flyknit, que es ligera y transpirable, mejora incluso más la experiencia al correr. Además, solo pesan 190 gramos, así que son mucho más ligeras que la media de las superzapatillas (214 gramos). De hecho, se sienten incluso más ligeras en los pies gracias a su excepcional flujo de aire, demostrando que se merecen el 5/5 que se han llevado en nuestra prueba de humo.

Al final, un modelo con este rendimiento tan alto también tiene un precio muy alto. Sí, nosotros creemos que es una inversión que merece la pena, pero puede que los corredores con un presupuesto ajustado prefieran echarle un ojo a otra cosa.

Las Adidas Adizero Takumi Sen 10 nos parecen las mejores compañeras de entrenamiento para carreras de 5K y 10K por su increíble retorno de energía, sin la rigidez que normalmente se asocia con los modelos de competición. Nuestro laboratorio también ha revelado que se centran en ser ligeras, que es algo que nuestros pies sintieron cuando corrimos con ellas.

Cada paso que dimos hacia delante estaba lleno de vigor y potencia gracias a la dinámica mediasuela de las TS10. Cuando las cortamos por la mitad, vimos que estaban diseñadas con Energy Rods 2.0 intercaladas entre las capas de espuma Lightstrike Pro. Nuestro durómetro indició que la capa de espuma de arriba se centra en el confort (con un resultado de 13,4 HA), mientras que la capa de abajo es más firme (20,4 HA) para proporcionar estabilidad.

A pesar de tener varillas de fibra de vidrio, las TS10 son solo un 4,2 % más rígidas que la media de las zapatillas de running. Los modelos que tienen placa suelen ser mucho más rígidos, lo que hace que la comodidad, la sensación natural y la velocidad de las TS10 destaquen.

Su diseño ligero y su parte superior transpirable hacen que correr con ellas no cueste nada de nada. Nuestra báscula lo confirmó, marcando que pesan solo 200 g, y eso que la media de las zapatillas de running asciende a los 265 g. Además, la ventilación tampoco nos dio problemas, ya que nuestros resultados de laboratorio indican que este par se llevó una puntuación perfecta en nuestras pruebas de transpirabilidad.

Sin embargo, aunque tiene un buen agarre, la durabilidad de la suela exterior Continental nos preocupa. Como es un 34,9 % más blanda y 1,4 mm más fina que la media, no podemos esperarnos que estas zapatillas nos vayan a durar mucho. Si estás buscando un modelo del que presumir todos los días, es mejor que le eches un ojo a una opción más resistente.

Las Nike ZoomX Streakfly demostraron ser más rápidas que un rayo en nuestras carreras. Increíblemente ligeras y ágiles, las distancias cortas son pan comido para ellas gracias a la ayuda de su mediasuela ZoomX, que es mullida y dinámica, como vimos nuestro laboratorio. Además, tampoco cuestan un ojo de la cara, así que las hemos escogido como el par con la mejor relación calidad-precio entre las zapatillas de running de 5K y 10K.

Al no tener placa, la potencia de las Streakfly reside en su mediasuela mullida, que hace que cada paso sea vibrante y enérgico. Nuestro durómetro confirma que es un 42,4 % más blanda que la media, lo que aumenta la comodidad y el rebote.

Con sus 171 g según nuestra báscula, literalmente parece que no las llevas puestas, ¡es el modelo más ligero que hemos visto en nuestro laboratorio! Si a su estructura de poco peso le sumamos que no tienen una placa de carbono, entonces entendemos mejor que este modelo tenga una pisada increíblemente fluida y fácil de controlar. De hecho, nuestra prueba de flexión confirma que se necesita un 54,7 % menos de fuerza que la media para doblarlas a 90 grados.

Incluso durante los días más calurosos, nuestro calor corporal y el sudor pudieron escaparse fácilmente a través de la parte superior de estas Nike. Nuestra prueba de humo lo deja claro, ya que se llevaron una puntuación perfecta. Sin embargo, estas zapatillas carecen de la estructura necesaria para los que requieren un extra de sujeción. Los que necesiten un modelo con características de estabilidad deberían buscar otras alternativas.

Les hemos hecho un montón de pruebas a las zapatillas de running para distancias de 5K y 10K, y hemos descubierto que las Saucony Endorphin Pro 4 son las mejores amigas de los talonadores. Gracias a su ligereza y a su tecnología Speedroll, las EP4 hacen que cada paso esté lleno de poder, a lo que se le suma una mediasuela dinámica que ofrece tanto comodidad como sujeción. Nuestro laboratorio lo ha confirmado: que su rendimiento sea ideal no les cuesta nada.

Nuestra mediasuela cortada revela que la suela en el talón tiene una altura de 38,1 mm, garantizando así una pisada suave y de bajo impacto. Si a esto le sumamos su modesto antepié, obtenemos un drop de 9,5 mm, lo que facilita unas transiciones más fluidas para los talonadores. También descubrimos capas de doble densidad que se traducen en una pisada cómoda y reactiva: la de arriba se centra en la comodidad (18,5 HA), mientras que la de abajo es más firme (22,0 HA) para mejorar la seguridad en los aterrizajes.

Entre las dos espumas hay una placa de carbono en forma de S que es un 140,8 % más rígida que la media. Sí, lo has leído bien, no te preocupes. Con la tecnología Speedroll, esto se tradujo en zancadas llenas de fluidez y enorme retorno de energía cada vez que corrimos con este par.

A pesar de toda la amortiguación, las EP4 nos sorprendieron con sus 220 g, así que son un 17,0 % más ligeras que la media. Incluso así, es muy probable que otras superzapatillas de élite se sientan más ligeras y rápidas. Si lo que quieres es batir tus marcas personales, puede que lo mejor sea echarle un ojo a otras opciones.

Durante nuestras carreras, las Hoka Rocket X 2 fueron más rápidas que un cohete pero tan estables como un tren. Su mediasuela de primera es increíblemente reactiva, y además tienen una suela exterior muy robusta. Incluso siendo muy mullidas, nuestro laboratorio confirma que incluyen elementos de sujeción sutiles que hacen que sea nuestro modelo de estabilidad favorito para las carreras de 5K y 10K.

Como son tan difíciles de doblar torsionalmente, nos aseguran que no nos vamos a caer incluso en los esfuerzos más duros. Es más, en nuestra evaluación manual se llevaron la máxima puntuación en rigidez torsional. Cuando las cortamos por la mitad en el laboratorio, descubrimos que su plantilla tiene paredes que hacen que nuestros pies estén seguros y en su sitio.

Nos encanta que estas zapatillas sean tan estables, ya que tienen una suela altísima, de 37,7/31,1 mm. Las Rocket X 2 garantizan que estemos bien protegidos y llenos de energía para recorrer cualquier distancia. Nuestro durómetro marcó 17,4 HA cuando analizamos la espuma, pero nunca nos hundimos en las zapatillas, ya que la espuma PEBA nos pareció muy reactiva.

Además, vimos que en la suela tienen una amplia cobertura de caucho que protege la mediasuela. Aunque nuestro durómetro marcó unos duros 81,6 HC, nunca flaqueó en términos de agarre. Esta cifra, junto con los daños mínimos de 0,5 mm en nuestra prueba Dremel, sugiere que estas zapatillas son muy resistentes al desgaste.

Sin embargo, hemos observado que el talón es 5,5 mm más estrecho que el de la media de las zapatillas de running, lo que puede hacer que los talonadores no consigan un aterrizaje estable.

Las ASICS Noosa Tri 16 nos ofrecen velocidad y sujeción en una pisada natural. Su ligereza y amortiguación reactiva hicieron que nuestras carreras no nos supusiesen ningún esfuerzo, e incluso consiguieron que cada uno de nuestros pasos estuviese acompañado por una sutil estabilidad. Nuestros datos de laboratorio revelaron que son increíblemente flexibles, lo que las convierte en nuestras zapatillas de running para 5K y 10K sin placa número 1.

Las Noosa Tri 16 demuestran que la velocidad y la comodidad pueden ir de la mano. Sus 217 g están a la altura de las zapatillas de competición que hemos analizado en nuestro laboratorio y son un 18,1 % más ligeras que la media de las zapatillas de running. Gracias a la fluidez que proporciona su mediasuela, estas zapatillas se sienten incluso más ligeras. De hecho, en nuestra prueba de flexión vimos que son un 27,9 % más flexibles que la media, aumentando así su agilidad.

La espuma FF Blast+ es una maravilla, ya que ofrece protección contra impactos y retorno de energía. Nuestro durómetro indica que es un 12,9 % más blanda que la media, un resultado que nos parece ideal tanto para los días de recuperación como para subir el ritmo cuando nos toca competir. Además, su pisada también se siente estable. De hecho, en nuestro laboratorio descubrimos que cuentan con el sistema 3D Guidance System, que incluye paredes laterales en la mediasuela y extensiones en la suela para ofrecer una sujeción sutil.

La parte superior es muy transpirable, pero lo pasó mal en nuestra prueba Dremel, así que no podemos recomendarles este par a los corredores que están buscando un modelo con una parte delantera más duradera.

Con una tracción que parece casi magnética en cualquier superficie por la que corriésemos, es fácil darles el número 1 a las PUMA Deviate Nitro 3 como las zapatillas de running para 5K y 10K con mejor agarre. Girar incluso cuando estamos corriendo a toda pastilla nos pareció facilísimo gracias tanto a su tracción como a su PWRPLATE rígida y a su amortiguación reactiva. Además, nuestro laboratorio está de acuerdo en que son unas todoterreno excepcionales.

Una de sus características más destacadas es la suela exterior PUMAGRIP ATR, que obtuvo un resultado de 72,0 HC en nuestro durómetro, por lo que es un 10 % más blanda que la media. Esta cifra sugiere que la tracción y la estabilidad serán fiables en condiciones difíciles, que es justo lo que experimentamos al correr por carreteras mojadas e incluso por senderos sencillos.

Las DN3 satisfacen nuestras ganas de subir el ritmo gracias a su PWRPLATE, que nos impulsó hacia delante. Resulta que son un 24,0 % más rígidas que la media según nuestra prueba de flexión, lo que se traduce en una pisada muy reactiva y llena de energía. La mediasuela también ofrece rebote, haciendo que cada paso esté protagonizado por la comodidad. Cuando cortamos esta pieza por la mitad, vimos que tenía un diseño de doble espuma: una capa superior (19,0 HA) con rebote y una capa base incluso más blanda (18,0 HA) para suavizar incluso más los impactos contra el suelo. Las DN3 nos dejaron claro que no es necesario sacrificar la comodidad para obtener velocidad.

Sin embargo, los 268 g de estas zapatillas pueden ser demasiado para competir. Creemos que encajan más en la categoría de superzapatillas de entrenamiento que de par con el que batir todos los récords.