Hoka Rocket X 2: análisis y review

Creemos que las Hoka Rocket X 2 son ideales para:

• Los corredores de pies estrechos que buscan unas zapatillas de competición con un ajuste perfecto.
• Quienes buscan unas de competición versátiles que sean también adecuadas para distancias que van desde un par de kilómetros hasta una maratón.
• Los fans incondicionales de Hoka que han estado explorando otras marcas en busca de unas zapatillas de competición, ya que muchas no tienen PEBA. Con estas nuevas zapatillas, ¡ya estamos de vuelta en casa!

Si tienes los pies anchos, las Rocket X 2 tal vez no sean las ideales para ti, incluso si te las compras en una talla más. Hemos descubierto que hay otras zapatillas de competición de primera categoría, como las Adidas Adizero Adios Pro 3 o las ASICS Metaspeed Edge+, que se ajustan mejor.

Los corredores que están buscando las zapatillas de competición más ligeras del mundo también deberían pasar de ellas ya que, en nuestras pruebas de laboratorio, hemos comprobado que las Rocket X 2 son más tirando a pesadas.

En comparación, las Nike Vaporfly 2 tienen una amortiguación y una espuma Pebax similares, pero son mucho más ligeras.

Vimos que el talón tiene unos generosos 37,7 mm de espuma. Esto se acerca al máximo de 40 mm establecido por la World Athletics.

También satisfacen nuestras expectativas y nos dan la confianza de que tendremos las piernas bien sujetas durante toda una maratón.

Pasamos al antepié y vimos que estaba ligeramente por encima de la marca de los 30 mm, con 31,1 mm. Esto es crucial tanto para los que aterrizan con el antepié como con el mediopié y que necesitan amortiguación en esta zona.

Basándonos en las dos mediciones que tomamos en el laboratorio, descubrimos que las zapatillas tienen un drop real de 6,6 mm.

Esto ofrece un equilibrio redondo adecuado para todos los tipos de pisada. Curiosamente, hay una ligera discrepancia con las propias especificaciones de Hoka: dicen que tienen 5 mm. Así que sí que están cerca, ¡pero no han sido precisos del todo!

En nuestro laboratorio, hemos comprobado que la plantilla es una de las más finas que hemos medido nunca, con 2,5 mm. Pero eso no es un problema.

De hecho, es una ventaja: ¡cuanto más fina sea la plantilla, más rebote tendrá la mediasuela!

En cuanto a la mediasuela, Hoka la ha cambiado bastante. Han abandonado su antigua espuma basada en EVA y le han puesto una espuma PEBA de primer nivel y alto rendimiento que ofrece un excelente retorno de energía.

A la hora de probar la suavidad de este material, vimos que tenía 17,4 HA. Si bien es suave, no es excesivamente blando. Esto garantiza que notaremos las pisadas reactivas y con rebote sin darnos la sensación de que los pies se nos hunden en la zapatilla.

Para ver cómo se comporta la nueva espuma PEBA cuando hace frío, metimos las zapatillas en el congelador durante 20 minutos y luego tomamos nuevas medidas.

Pudimos comprobar que, efectivamente, se vuelve un poco más firme, ya que nuestro durómetro marcó 20,0 HA.

Con un impresionante 15,1%, estas zapatillas se sitúan entre las zapatillas de running de mejor rendimiento en esta prueba. Efectivamente, ¡la mediasuela PEBA ha cumplido!

El ajuste ceñido de las zapatillas también lo vimos bien claro en la parte delantera. La medimos y nos dio 89,5 mm, lo que confirma su diseño ajustado.

Es muy sencillo: estas zapatillas están pensadas para quienes tienen los pies estrechos. Si tienes los pies de anchura media, considera la posibilidad de comprártelas en media talla más. Mientras tanto, las personas que tienen los pies más anchos pueden buscarse otras opciones.

La zona del dedo gordo sigue siendo ligeramente más estrecha de lo habitual. En el laboratorio la medimos y nos dio 75,4 mm.

La lengüeta de las Rocket X 2 está semi reforzada, lo que significa que está parcialmente unida a los laterales.

Creemos que esta es una estrategia excelente para asegurar un buen cierre, evitando que la lengüeta se mueva, lo que hemos visto que ocurría en zapatillas de competición como las Nike Vaporfly 2.

Mientras que las superzapatillas suelen ser inestables, estas Hoka se notan bastante estables incluso a ritmos fáciles.

Descubrimos que la estabilidad proviene de un elemento de diseño inteligente. Las Rocket X 2 tienen una plantilla con paredes, que nos hace sentir como que tenemos el pie dentro de las zapatillas, no solo que estemos de pie sobre ellas. Como si estuviéramos recostados sobre los asientos de un Porsche.

Puesto que tienen una placa de carbono intercalada entre las dos capas de espuma PEBA, naturalmente esperábamos una puntuación de 5/5 en la prueba de rigidez torsional. Y eso es justo lo que obtuvimos.

Que el talón no tenga forma hace que la puntuación de rigidez en esa zona sea de un 1/5, aunque no hemos notado que el talón se salga.

Con 113,3 mm, la anchura de la mediasuela es similar a la de zapatillas de uso diario, como las Hoka Clifton 9.

Hemos comprobado que gracias a este diseño notamos los aterrizajes cómodos y hacen que las zapatillas se noten estables. Esto contrasta con algunas zapatillas pensadas para la velocidad que pueden ser demasiado estrechas y dar la sensación de tambalearse más.

La historia es diferente cuando nos fijamos en el talón, porque tiene 85,2 mm, lo que consideramos estrecho.

Descubrimos que los talonadores extremos podrían tal vez prefieran unas más anchas en esta zona como las Hoka Carbon X 3. Aunque no tienen la espuma con rebote, les da más estabilidad.

Las Rocket X 2 son RÍGIDAS. En nuestra prueba de flexión a 90 grados, medimos que tenían 80,7 N, lo que las convierte en unas de las zapatillas más rígidas que hemos probado en el laboratorio.

Este nivel de rigidez puede ser fantástico para notarlas ágiles y con rebote, justo lo que muchos corredores buscan para competir. Sin embargo, también creemos que habrá a quienes les parezca demasiado. Si este nivel de rigidez te resulta incómodo, quizás te convenga más unas zapatillas de máximo rendimiento sin revestimiento como las ASICS Superblast.

Después de meter las zapatillas en el congelador durante 20 minutos, volvimos a hacerles la prueba de rigidez en nuestro laboratorio. El resultado fue de 90,0 N.

Esa cifra refleja fielmente los resultados de la prueba a temperatura ambiente.

Ese nivel de primera categoría se debe exclusivamente a la espuma PEBA. Una espuma de alta calidad que nos da resultados de alta calidad...

No, no son las superzapatillas más ligeras que se han hecho jamás. Hemos descubierto que la suela, que acabamos de examinar, hace que pesen más.

Si lo que buscas es rendimiento, quizá te convenga más una opción más ligera como las Endorphin Elite o las Metaspeed Sky+. Sin embargo, si buscas unas zapatillas de competición muy resistentes,  tienes que saber que ese es el precio a pagar.

Aunque las Rocket X 2 obtuvieron una puntuación de 4/5 (una buena nota, se mire por donde se mire), esperábamos un 5/5 perfecto. Siendo las primeras zapatillas de maratón de Hoka, y con un precio de 250 €, deberían destacar en todas las categorías de rendimiento, incluyendo la transpirabilidad.

A primera vista, pensábamos que estábamos ante unas zapatillas ultratranspirables. Esta impresión la confirmamos con la prueba de luz que le hicimos en la que algunas partes del upper parecían casi transparentes. Era un efecto que no habíamos visto nunca.

Incluso sin luz pudimos ver fácilmente la mano a través del tejido, algo con lo que pocas veces nos hemos encontrado en las pruebas de laboratorio.

Desconcertados, fuimos corriendo al microscopio de nuestro laboratorio en busca de respuestas.

Descubrimos que las Rocket X 2 tienen una malla que es más densa que la de otros uppers que vemos en otras zapatillas de competición. Esta es la razón por la que no han logrado un 5/5.

La diferencia con las Nike Streakfly (5/5 en esta prueba) es enorme.

Podrías pensar que, al sacrificar una transpirabilidad de primer nivel, eso significaría que lo más destacado de las Rocket X 2 sería la durabilidad... Pero, por desgracia, no es el caso.

Después de llevar a cabo nuestra prueba dremel en el laboratorio, vimos que obtuvieron la puntuación más baja posible. La realidad es que es totalmente normal siendo unas zapatillas de competición, excepto en el caso de algunas atípicas como las Nike Alphafly 2.

La historia cambia radicalmente cuando nos fijamos en el talón. Es bastante resistente (5/5) y eso tiene una justificación.

Mientras que las zapatillas de entrenamiento diario suelen tener mucho acolchado y materiales más blandos en el talón para mayor comodidad, las zapatillas de competición hacen todo lo contrario.

El caucho de la suela de las Rocket v2 es bastante duro para ser unas zapatillas pensadas para competir.

Normalmente, que el caucho sea más blando hace que tenga mejor agarre. Sin embargo, estas zapatillas miden 81,6 HC, un resultado similar a lo que vemos en las zapatillas de uso diario, y siguen teniendo un agarre impresionante tanto en seco como en mojado.

Estábamos deseando saber si nuestras sospechas sobre la durabilidad se cumplían al hacerles la prueba con la dremel.

Nos complace comunicar que hemos visto una pequeña hendidura de 0,5 mm en el caucho.

Tras hacer las dos pruebas anteriores y descubrir ahora que tienen un grosor de 2,0 mm, creemos con confianza que estas zapatillas les servirán a los corredores durante unos impresionantes 200-300 kilómetros sin mostrar apenas desgaste en la suela.

Hoka decidió no añadirles elementos reflectantes, y entendemos su decisión. Antes hemos mencionado que, para ser unas zapatillas de competición, las Rocket X 2 pesan un poco.

Añadirle más peso a unas zapatillas que se van a utilizar sobre todo durante el día no sería muy práctico, la verdad.

La lengüeta de las Rocket X 2 es bastante fina, especialmente si la comparamos con la de muchas otras zapatillas de running.

Sin embargo, es increíblemente suave en comparación con las típicas lengüetas de las zapatillas de competición, que suelen tener menos de 1 mm. Comprobamos que los 1,9 mm de grosor resultan comodísimos para ser este tipo de zapatillas.

Hoka decidió no ponerle tirador en el talón para que pesaran un poco menos. Creemos que si lo tuviera sería más fácil calzárselas.

Tienen la plantilla extraíble, lo que agradecemos ya que son unas zapatillas de competición. Sin embargo, es cierto que si estás pensando en ponerles tus propias plantillas, a lo mejor te cuesta ponérselas. 

Como hemos comentado antes, este tipo de zapatillas son bastante estrechas, por lo que el espacio interior es limitado.