Las 7 Mejores Zapatillas De Entrenamiento De Series del 2024

Unas verdaderas maestras de su oficio. Las Mach 6 nos asombran con su impulso inquebrantable y su facilidad para avanzar. Como confirman nuestras pruebas de laboratorio y nuestras pruebas de uso corriendo con ellas, ofrecen una pisada fluida llena de energía y sujeción, lo que hace que estas Hoka sean nuestras zapatillas de entrenamiento de velocidad ligeras número uno.

Favorecen unas zancadas suaves y naturales que se funden a la perfección con nuestros pies. Tienen una espuma delicada y equilibrada pero con rebote. Nuestro durómetro revela que es blanda (20,4 HA en comparación con la media, de 21,3 HA), pero nos gusta que no sea excesivamente mullida. Al ser menos densa de lo habitual, tiene un peso más ligero, de 232 g, a pesar de ser más alta que la media.

Casi te olvidas de que las llevas puestas porque se fusionan con los pies, lo que has lace más cómodas y versátiles para diversas actividades. Nuestra prueba de flexión revela que son un 36,4 % más flexibles que la media.

A pesar de su plataforma blanda y su mediasuela flexible, se mantienen sorprendentemente estables a altas velocidades. Hoka garantiza una pisada segura haciendo que su Durabrasion Rubber obtenga un suave resultado de 75,1 HC en comparación con la media, de 80,2 HC, lo que se traduce en una tracción más fuerte en cualquier superficie.

Otra de las principales causas de la reducción de peso de las Mach 6 es su estructura ligeramente estrecha. Creemos que este modelo no es ideal para las personas con pies anchos.

Con la energía en su ADN, las Saucony Endorphin Speed 4 se llevan el trofeo a las mejores zapatillas de entrenamiento de velocidad. Con una sensación de ligereza extrema en nuestras carreras, su placa de nylon nos llevó rápido mientras que su amortiguación llena de sujeción nos llevó lejos. Como revela nuestro laboratorio, su naturaleza versátil las hace adecuadas para varios entrenamientos de running.

Son las zapatillas de entrenamiento de alto rendimiento perfectas, ya que mantienen nuestra velocidad sin la sensación ultra-rígida de las placas de carbono. En su lugar, cuentan con una placa de nylon alada blanda en su mediasuela para conseguir esa agradable reactividad que no resulta demasiado abrumadora. Nuestra prueba de flexión confirma que su flexibilidad está en torno a la media de las zapatillas de running para asfalto (29,4 N), pero con un impulso extra de energía.

La mediasuela es cómoda gracias a su suela de 36,2/27,5 mm, más alta que la media. Para equilibrarlo, cuentan con una amortiguación firme que mejora la estabilidad independientemente del ritmo. Nuestro durómetro confirma un resultado medio de 22,3 HA, lo que las hace adecuadas para cualquier entrenamiento de running que tengamos ese día.

Correr con las ES4 es como flotar. Nuestro laboratorio revela que solo pesan 237 g (8,4 oz), un 10,9 % menos que la media. Su parte superior de malla tiene grandes orificios de ventilación para un flujo de aire sin restricciones, así que se llevaron una merecida puntuación de 5/5 en nuestras pruebas de transpirabilidad.

Eso sí, te advertimos que hay que tener cuidado con atarse los cordones demasiado fuerte, ya que la lengüeta tiene solo 2,0 mm de grosor para mantener el peso de estas zapatillas al mínimo.

Las cuartas Novablast son la prueba viviente de que la velocidad y la comodidad pueden combinarse a la perfección. Una espuma extraordinaria transmite energía bajo nuestros pies al tiempo que proporciona mucho alivio y estabilidad para facilitar las sesiones de velocidad más brutales. Los resultados de nuestro laboratorio dejan claro por qué hemos elegido a las Novablast 4 las zapatillas de velocidad con la mejor amortiguación mullida.

Nuestro durómetro revela un resultado de solo 16,9 HA al ponerlo contra la mediasuela, que es un 28,7 % más blanda que la media. A pesar de temer una espuma más ligera, nuestras carreras estuvieron llenas de energía. Nos hemos quedado boquiabiertos con cómo el confort y el rebote no desaparecen ni en las distancias más largas, haciendo que correr sea incluso más divertido. Además, nuestras piernas tampoco se cansaron mucho, ya que el calibre indicó que la suela en el talón es alta, con 39,2 mm, frente a la media de 33,5 mm.

Lo estable que es la pisada de este modelo minimalista nos pilló desprevenidos. Ofrecen una generosa anchura en la mediasuela para plantar firmemente los pies en el suelo. Nuestro calibre midió una amplia plataforma de aterrizaje de 122,8/94,7 mm. Ni cuando hicimos giros rápidos perdimos el equilibrio.

Aunque creemos que las Novablast 4 tienen el agarre suficiente para la mayoría de las aceras, les sigue faltando agarre en superficies mojadas. Si una tracción fiable es tu prioridad, te recomendamos que le eches un ojo a otro modelo.

En nuestras pruebas de uso corriendo con ellas, así como en nuestras pruebas de laboratorio, pudimos comprobar que las Saucony Kinvara 15 ofrecen velocidad gracias a su aura ligera y minimalista. Hicieron que no nos costase nada avanzar gracias a su pisada natural y estable, que viene de su mediasuela flexible y de su mayor contacto con el suelo. Entre las zapatillas de entrenamiento de velocidad, son nuestras número 1 con drop bajo.

Cuando calculamos su drop, nos dio 4,4 mm, que es un 48,8 % inferior a la media. Esto hace que la experiencia barefoot sea mejor, permitiéndonos fortalecer las piernas sin tener que ir a por un modelo con drop cero. La suela es más baja que la media y cuenta con una amortiguación equilibrada (23,8 HA) que mejora de forma natural nuestra estabilidad.

Las Kinvara 15 son flexibles, lo que las hizo más cómodas cuando nos las pusimos durante muchas horas. La mediasuela apenas se resistió a nuestros movimientos, lo que confirmamos en nuestra prueba de flexión cuando vimos que era un 53,3 % más flexible que la media.

Lo que hace que estas zapatillas tengan el título de velocistas es su peso. Con sus 194 g, no son más que un par de plumas, ¡y hasta son más ligeras que otras superzapatillas! De hecho, en comparación con la media de nuestro laboratorio, pesan un 26,8 % menos.

Sin embargo, el precio a pagar por su ligereza fue una suela exterior más blanda y fina que la media, lo que nos hace dudar de su durabilidad a largo plazo. Si prefieres un par que te dure mucho tiempo, lo mejor es que pases de este.

Cuando se trata de entrenar la velocidad en la pista, las Nike ZoomX Streakfly son las mejores. Volamos cogiendo curvas rápidas y cerradas con elegancia, con su estructura excepcionalmente ligera y ágil. Después de analizarlas en nuestro laboratorio, podemos decirte que este modelo de velocidad está listo para ofrecer sujeción en las sesiones de verano con su pisada cómoda y su parte superior transpirable.

Estas zapatillas desaparecen en cuanto empezamos a correr. Nuestra báscula confirma que pesan 171 g (6,0 oz), así que son las más ligeras que hemos analizado en el laboratorio. Esta estructura ligera y la ausencia de una placa de carbono les confieren mucha agilidad, como pudimos comprobar en la pista cuando esprintamos en las curvas sin esfuerzo. Nuestro laboratorio confirma que son un 55,6 % más flexibles que la media, lo que las hace cómodas incluso para carreras relajadas.

Lo que nos impulsa tanto es la mediasuela ZoomX, fabricada con una espuma mullida y sus 12,1 HA, un resultado que está un 43,2 % por debajo de la media. Mantener ritmos altos resulta más fácil con el dinamismo que aportan las Streakfly.

La parte superior ultratranspirable aumenta aún más la comodidad, como confirman nuestras pruebas de laboratorio, en las que se llevaron una puntuación perfecta. En ningún momento sentimos que el calor de nuestro cuerpo se quedara atrapado en el interior, lo que evita la aparición de ampollas y rozaduras.

Debido a su falta de estructura, enfrentarse a distancias de más de 10K es incómodo porque tienes que trabajar más duro para mantenerte estable.

Quienes necesiten unas zapatillas estables para hacer entrenamientos de velocidad no tienen que buscar más. Las Saucony Tempus controlan la sobrepronación con clase mientras se mueven a gran velocidad con un rebote enérgico y una suela impenetrable.

Saucony no complicó en exceso el sistema de estabilización, poniendo todas las fichas en el jugador estrella: la mediasuela. Está fabricada a partir de una espuma compuesta y se ensancha hacia los bordes de la suela en nombre de una estabilidad que fue la reina de nuestras carreras con ellas. La comprobación de su suela con nuestro calibre reveló una anchura de la mediasuela de 117,4 mm en el antepié y 94,5 mm en el talón, superando sin esfuerzo la media en 4,6 mm en ambas mediciones.

De lo que disfrutamos de verdad en las sesiones de prueba fue de la geometría tipo rocker, ya que suavizaba todas las transiciones talón-punta. El rebote de su mediasuela hace que las Tempus sean más bien rápidas, devolviendo alegres ráfagas de energía a cada paso. Además, bajo todo ello se esconde una suela titánica. Con una puntuación de 89,5 HC en nuestro medidor de la dureza, el caucho de la suela es increíblemente resistente y denso, y promete una vida útil interminable. En comparación, la suela media da unos 80,0 HC.

Sin embargo, con un precio de 160 euros, se trata de unas zapatillas de velocidad caras. Las zapatillas de estabilidad tienen un precio medio de 135 €, por lo que los amantes de la velocidad que tengan un presupuesto ajustado deberían pensárselo dos veces antes de sumergirse en la experiencia Tempus.

A 100 €, las Saucony Axon 3 nos ofrecieron una velocidad inimaginable en nuestras carreras. Cuentan con una suela exterior resistente y una amortiguación protectora, todo ello en un diseño ligero. Por su precio, están muy por debajo de la media de las zapatillas de entrenamiento de velocidad (147 €) y tienen las cualidades de los modelos más premium. Los resultados de nuestras pruebas de laboratorio consolidan su estatus como las mejores zapatillas de entrenamiento de velocidad baratas.

Son ligeras tanto para tu cartera como para los pies, ya que según nuestra báscula pesan solo 244 g (8,6 oz), un 8,3 % menos que la media de las zapatillas de running. Esto potencia nuestra velocidad y agilidad, como podrían decirte las calles de nuestra ciudad si hablasen.

Cuentan con una espuma PWRRUN mullida bajo el pie que proporciona una sensación de lujo, añadiéndoles comodidad y protección contra impactos a nuestras carreras. Dada su ligereza, nos sorprendimos al ver que su suela medía 33,6/27,9 mm. Sin embargo, nuestro durómetro confirmó su ligereza, ya que la espuma es un 21,8 % menos densa que la media.

La suela exterior Carbon Rubber es una característica destacada, sorprendiéndonos con su agarre fiable y su impresionante resistencia. A pesar de las extenuantes pruebas en exteriores, el desgaste fue mínimo, respaldado por los datos de laboratorio que muestran un caucho resistente de 82,8 HC y 3,9 mm de grosor. Sin duda, estas zapatillas económicas pueden durar muchos bloques de entrenamiento.

Sin embargo, descubrimos que las Axon 3 no son las mejores para los talonadores extremos o los corredores con problemas en la parte inferior de las piernas debido a su estructura con drop bajo.