New Balance Minimus TR v2: análisis y review

Creemos que deberías echarle un ojo a las New Balance Minimus TR v2 si:

• Estás buscando unas zapatillas de entrenamiento minimalistas que sean muy ligeras y que tengan una suela muy bajita.
• Quieres empezar con las zapatillas barefoot pero todavía estás buscando algo que te proteja contra los impactos en el HIIT.
• Prefieres las zapatillas con un ajuste ceñido y que te puedes poner sin calcetines.

Si estás empezando en el mundillo de las zapatillas de entrenamiento funcional minimalistas, hemos analizado algunas alternativas sólidas a las NB Minimus TR v2 a las que deberías echarles un ojo: Altra Solstice XT 2, Reebok Nano 2.0 y Adidas The Total.

Las tres opciones que te mencionamos tienen una parte delantera bastante espaciosa, y además son más adecuadas para hacer peso muerto porque su suela es más plana. Sobre todo las Adidas The Total, ya que se fabricaron pensando específicamente en ese ejercicio.

Diseñadas para ser un modelo barefoot, no nos sorprende nada que las New Balance Minimus TR v2 tengan la suela más baja de todas las zapatillas de entrenamiento funcional que hemos analizado. Según nuestro calibre, solo tiene un grosor de 14,0 mm.

Este tipo de calzado imita la experiencia de entrenar descalzo y solo tiene la capa más básica de protección bajo los pies. La sensación de contacto con el suelo es excepcional, pero sí que cuesta un poco acostumbrarse a estas zapatillas si vienes de un par de entrenamiento estándar.

Las Minimus TR v2 también batieron el récord de la suela más baja en el antepié, ya que mide solo 11,8 mm.

Aunque este diseño hace que los movimientos sean muy naturales, ¡no olvides que estas NB casi no tienen amortiguación!

Estas zapatillas minimalistas ofrecen menos amortiguación y sujeción para los ejercicios de alto impacto que ejercen mucha presión sobre los metatarsos, como por ejemplo saltar a la comba.

La verdad es que nos sorprendió descubrir que el drop de las Minimus TR v2 es incluso inferior a los 4 mm de los que habla la marca.

La diferencia en la altura de la suela es de solo 2,2 mm, según nuestras propias mediciones. ¡Creemos que los amantes más puristas de las zapatillas estilo barefoot van a estar encantados con esto!

MUCHO OJO: La escasa o nula elevación del talón en unas zapatillas coloca el pie en una posición muy plana, igual que si estuvieras descalzo en el suelo. Si a esto le sumamos que este modelo tiene una suela muy bajita, se mejora la propiocepción y el uso muscular, pero también puede ser contraproducente al forzar el tendón de Aquiles u otras partes de los pies y de las piernas. Si estas son tus primeras zapatillas minimalistas, te recomendamos que te tomes la transición con calma y que hables con tu fisio si es necesario.

Según la marca, las NB Minimus TR v2 utilizan la espuma FuelCell en su mediasuela, pero como la capa de amortiguación es tan fina y densa, no se siente tanto rebote como con unas zapatillas de running FuelCell.

Lo bueno es que la espuma tampoco se siente muerta.

Cuando cortamos estas zapatillas por la mitad, descubrimos que su mediasuela tiene dos espumas de diferente densidad. Y como New Balance no menciona ninguna otra espuma en las especificaciones, suponemos que es FuelCell pero con dos densidades distintas.

Como zapatillas de entrenamiento funcional, tiene sentido que la espuma más firme esté en el talón para mejorar el equilibrio y la estabilidad. Cuando presionamos nuestro durómetro contra el compuesto más oscuro, marcó 30,0 HA, así que es un tipo de espuma firme que es menos propensa a comprimirse bajo peso.

Por otro lado, la de la zona del antepié es bastante más blanda. Nuestro durómetro marcó 22,0 HA, así que es un 36 % más blanda que la espuma que este modelo tiene en el talón.

Esto hace que la plataforma ayude un poquito más con los saltos y los ejercicios de alto impacto en los que sueles tener que estar de puntillas.

La plantilla de las NB Minimus TR v2 es prácticamente inexistente. Está totalmente integrada en la mediasuela (no es extraíble) y solo ocupa 1,7 mm de la plataforma.

La verdad es que ver el rocker del antepié y el biselado del talón en unas zapatillas de entrenamiento minimalistas nos dejó... totalmente boquiabiertos.

La idea detrás de las zapatillas minimalistas es que imiten la experiencia de ir descalzo tanto como sea posible sin interferir en la biomecánica natural. Pero como las Minimus TR v2 ya parecen un diseño experimental de New Balance..., ¿qué hay de malo en jugársela un poquito más?

Lo bueno es que la nueva geometría de las Minimus TR v2 no nos supuso ningún problema. De hecho, mejoró la fluidez de la pisada al caminar y al correr, así que lo único que nos preocupa es la estabilidad de estas zapatillas al hacer peso muerto... nuestros pies tuvieron que currárselo para no inclinarse demasiado hacia adelante.

Como buen modelo minimalista, las Minimus TR v2 se tienen que sentir como una segunda piel, pero creemos que lo ajustada que es su parte delantera puede ser demasiado para algunas personas.

Para que sepas exactamente cuánto espacio interior te puedes esperar de estas zapatillas, les hemos hecho un molde de gel. ¡Mira!

Cuando medimos el molde en su parte más ancha (en la zona de los metatarsos), nuestro calibre marcó 92,8 mm, así que son muy estrechas. Por eso mismo creemos que estas NB son más adecuadas para los deportistas con pies estrechos o de anchura media, así como para los que les gustan las zapatillas ceñidas. Si tienes los pies anchos, creemos que lo mejor es que te compres este modelo en tallas anchas (2E para hombres y D para mujeres).

También hemos comprobado que ponerse este par sin calcetines hace que el ajuste sea menos ceñido, y básicamente es como si te quedase como un guante. Incluso la marca afirma que su suave forro interior está pensado para llevarlo sin calcetines.

Lo bueno es que estas zapatillas no se estrechan demasiado hacia la punta, pero en la zona del dedo gordo sí que son un poquito más estrechas que la media, con 71,9 mm.

Curiosamente, a pesar de lo ceñidas que son las TRNR v2 en los laterales, ofrecen espacio vertical de sobra. De hecho, cuando medimos su altura, nuestro calibre marcó 34,0 mm.

No nos extraña nada que el material de la zona de los dedos de estas zapatillas se arrugue tanto.

Incluso la suela exterior de caucho de las Minimus TR v2 mostró un rendimiento mediocre en cuanto a durabilidad.

Cogimos nuestro durómetro para medir la dureza tanto de la goma como del caucho negro de estas zapatillas y, sorprendentemente, los resultados fueron casi idénticos. Cuando lo presionamos contra el compuesto negro marcó 75,0 HC, y en la goma 71,0 HC (así que solo es un 6 % más blanda).

De todos modos, ambos materiales son bastante más blandos que la media del caucho que se utiliza en las zapatillas de entrenamiento.

Es difícil quejarse de la estabilidad lateral de unas zapatillas de entrenamiento minimalistas. Cuando los pies están tan cerca del suelo, es casi imposible perder el equilibrio.

Ya sea haciendo sentadillas con mucho peso o en los desplazamientos laterales, las Minimus TR v2 nos mantuvieron firmes y seguros.

Aparte de lo estables que son ya estas zapatillas de por sí al ser tipo barefoot, no tienen ningún otro elemento que ofrezca sujeción. Estas New Balance están pensadas para moverse con el pie como si no existiesen.

Cuando retorcimos estas zapatillas con las manos nos dimos cuenta de que su rigidez torsional era mínima. De hecho, se llevaron la puntuación más baja en nuestra escala, ¡un 1/5!

No te dejes engañar por el cuello mullido que tienen. Aunque está muy acolchado, no tiene estructura y casi no ofrece sujeción en el talón.

De hecho, le dimos un 2/5 en rigidez solo por el acolchado.

Cuando medimos las dimensiones de la plataforma de las NB Minimus TR v2, no nos pareció especialmente ancha.

Nuestro calibre marcó 111,6 mm, que es una cifra estándar, cuando medimos la parte más ancha del antepié. La verdad es que no tenemos queja, ya que las extensiones de la suela en la cara externa e interna demostraron ser lo suficientemente anchas como para mantenernos firmes mientras entrenábamos.

El talón de las Minimus TR v2 no tiene nada del otro mundo, y de hecho es más estrecho que la media, con 83,0 mm.

Eso sí, en el talón hay una protección bastante grande.

Aunque entendemos que esto está pensado para las HSPU (flexiones verticales o de pino), creemos que el volumen es excesivo, ya que puede ser más perjudicial que beneficioso para otros ejercicios.

¿Quieres saber otra ventaja de las zapatillas minimalistas? Peus que tienes libertad total y absoluta para doblar el pie, ¡es como si no llevases zapatillas!

Nuestro medidor de fuerza mostró que las Minimus TR v2 solo necesitan 10,9 N para doblarse hasta un ángulo de 90 grados. Esto es un 60 % menos de lo que necesitan de media los modelos de entrenamiento.

Nos encantó que estas NB se adaptasen tan bien a las planchas, burpees, zancadas y a los entrenamiento de agilidad.

Aunque la 2ª versión de las Minimus TR ganó casi 45 g de peso, sigue siendo uno de los modelos de entrenamiento funcional más ligeros del mercado.

Con sus 251 g en una talla 9 estadounidense de hombre, es sobre 40 g más ligera que la media de las zapatillas para el gimnasio.

Además, su upper transpirable, lo bajísima que es su suela y lo flexible que es su diseño ayudan a que las New Balance Minimus TR v2 prácticamente desaparezcan al caminar.

No te dejes engañar por el cuello mullido que tienen. Aunque está muy acolchado, no tiene estructura y casi no ofrece sujeción en el talón.

De hecho, le dimos un 2/5 en rigidez solo por el acolchado.

Aunque las Minimus TR originales tenían problemas de transpirabilidad, las TR v2 han conseguido que su flujo de aire sea fantástico.

Cuando las sometimos a nuestra prueba de transpirabilidad, vimos que el humo podía salir sin problemas por su parte delantera. La verdad es que es algo que nos pilló desprevenidos, ya que el material no nos pareció muy poroso cuando lo pusimos bajo nuestro microscopio.

A pesar de estar densamente tejida, la parte superior textil de estas zapatillas es muy cómoda y deja que el aire entre y salga.

Pero la malla no es la única que se encarga de que la transpirabilidad sea adecuada. Cuando pusimos un cacho del upper frente a nuestra luz LED, vimos que había perforaciones por toda la lengüeta.

Con todas estas conclusiones, además de nuestra experiencia positiva durante las pruebas de uso, hemos decidido darles un 5/5 en transpirabilidad a estas New Balance. ¡La máxima puntuación!

Al menos es bueno saber que la suela exterior de estas zapatillas es lo suficientemente gruesa. Nuestro calibre marcó 3,3 mm cuando la medimos, que es una cifra estándar.

El forro del interior del cuello del talón de este modelo tampoco nos dio muchas esperanzas.

En solo 4 segundos, nuestro Dremel lo hizo picadillo, así que no pudimos darles más que un 2/5 en durabilidad del acolchado del talón a estas New Balance.

Por mucho que nos guste poder ponernos las Minimus TR v2 sin calcetines, probablemente las uñas de nuestros pies terminen haciéndoles un agujero en el forro más pronto que tarde.

Incluso la suela exterior de caucho de las Minimus TR v2 mostró un rendimiento mediocre en cuanto a durabilidad.

Cogimos nuestro durómetro para medir la dureza tanto de la goma como del caucho negro de estas zapatillas y, sorprendentemente, los resultados fueron casi idénticos. Cuando lo presionamos contra el compuesto negro marcó 75,0 HC, y en la goma 71,0 HC (así que solo es un 6 % más blanda).

De todos modos, ambos materiales son bastante más blandos que la media del caucho que se utiliza en las zapatillas de entrenamiento.

Aunque nos encantó que el caucho blando de estas zapatillas ofreciese un agarre tan fantástico, su durabilidad... no es la mejor.

Después de que nuestro Dremel le diese caña durante 22 segundos a una velocidad de 10K RPM, vimos que los daños eran bastante profundos.

De hecho, nuestro medidor de desgaste de neumáticos marcó 1,6 mm. Así que, efectivamente, los daños son más profundos que la media.

Aunque este caucho no es el más resistente a la abrasión, estamos muy contentos de que New Balance se haya esforzado tanto en proteger a estas zapatillas del desgaste al subir la cuerda.

Las Minimus TR v2 tienen tanto protecciones de caucho como superposiciones en el mediopié para evitar que la cuerda queme las zapatillas. Lo único sobre lo que tenemos que advertirte es que la protección cubre un área relativamente pequeña, y si la cuerda consigue esquivarla, las zapatillas terminan hechas un desastre.

Al menos es bueno saber que la suela exterior de estas zapatillas es lo suficientemente gruesa. Nuestro calibre marcó 3,3 mm cuando la medimos, que es una cifra estándar.

El precio de venta al público de las Minimus TR v2 está justo en la media de las zapatillas de entrenamiento, pero como tienen un diseño tan único (e incluso experimental), creemos que merece la pena esperar a que haya algún descuento.

Estas zapatillas tienen algunas cosillas que podrían echar para atrás a algunas personas a la hora de comprárselas, sobre todo porque al final hay un montón de modelos de entrenamiento diario excelentes y fiables por el mismo precio.

Aunque el cuello del talón es mullidito, el upper de este modelo es muy mínimo. De hecho, su lengüeta es de las más finas que hemos visto, con solo 2.0 mm de grosor.

Lo malo es que su lengüeta sin refuerzo, fina y larga nos pareció bastante molesta.

Al llegar a la parte más intensa de nuestro entrenamiento, la lengüeta empezó a moverse y a doblarse, haciendo que tuviésemos que pararnos a ver qué pasaba.

New Balance no les ha puesto un tirador en el talón a las Minimus TR v2.

Creemos que utilizar tus propias plantillas con las NB Minimus TR v2 puede ser un problema, ya que la que traen ellas no es extraíble y el espacio interior de las zapatillas es bastante limitado.