Las 7 Las Mejores Zapatillas Para Enfermeras del 2024

Cómo les hacemos pruebas a las Las mejores zapatillas para enfermeras

Estamos orgullosos de poder decir que nuestros análisis y reviews son imparciales, y para conseguirlo seguimos estos pasos:

• Compramos estas zapatillas con nuestro propio dinero. Sin patrocinios y sin ofertas para mantener la objetividad.
• Les hacemos pruebas de uso, así que caminamos, estamos de pie y trabajamos con ellas puestas. También nos las ponemos sobre diferentes superficies, pero sobre todo en hormigón y cemento. Como somos un grupo de probadores, tenemos experiencias distintas. Siempre puedes leer sobre los autores de los análisis y reviews en nuestra web, donde te dejamos sus mini biografías.
• Analizamos los datos de nuestras pruebas de laboratorio y los publicamos de forma que puedas comparar cada modelo con los demás, viendo las diferencias. Por si esto fuera poco, también cortamos las zapatillas por la mitad para ver todas las capas y elementos de su interior.

¿Qué hace que unas zapatillas sean las mejores para enfermeras? (Y no, no vale cualquier modelo)

Teniendo en cuenta cuántas horas se pasan de pie las enfermeras a lo largo de su turno, un buen par de zapatillas es tan importante como ponerse una mascarilla. Pero, ¿cuál es el precio a pagar si escoges mal tus zapatillas?

Pues mira, es una pena, pero las investigaciones demuestran que los profesionales de enfermería corren un mayor riesgo de padecer trastornos musculoesqueléticos al caminar y estar de pie tanto tiempo. Esto último también se asocia a los dolores lumbares y en las piernas, que requieren complementos especiales como alfombras, escritorios para trabajar de pie o sillas específicas, plantillas, medias especiales y, por supuesto, un calzado adecuado.

Entonces, ¿cómo sabemos que unas zapatillas son buenas para enfermeras? Pues porque tienen estos detalles:

1. Están bien amortiguadas: La espuma de la mediasuela ofrece suficiente absorción de impactos para estar todo el día andando o de pie.
2. Sujeción: Te hacen sentir estable y seguro, sin forzar micromovimientos que hacen que los pies se cansen antes.
3. Se adaptan a tus patologías del pie: Como profesional de la salud, cuidas de tus pacientes 24/7, pero..., ¿tus zapatillas se adaptan a las necesidades (si es que las tienes) de tus pies? Como juanetes, fascitis plantar, pies planos, etc.
4. Un buen ajuste: Las zapatillas se sienten perfectas tanto en anchura como en longitud.
5. Una estructura transpirable: El sudor y el calor no se acumulan fácilmente dentro de las zapatillas.
6. Requisitos especiales: A lo mejor prefieres un upper de cuero que te sea más fácil de limpiar o una suela antideslizante para minimizar el riesgo de resbalones en azulejos mojados. O quizá tu hospital tenga un código de vestimenta estrictamente regulado.

Por qué las zapatillas de deporte pueden ser mejor que las Crocs

Muchas enfermeras y otros profesionales de la salud tienen predilección por las Crocs y apuestan por estos cómodos zuecos de espuma. Mencionan la comodidad, la sujeción y lo fáciles que son de limpiar como algunas de las principales razones por las que elegir este tipo de calzado.

Pero hay algunas razones de peso por las que a lo mejor prefieres ponerte unas zapatillas de deporte para tu turno:

• Diseñadas originalmente para caminar y correr muchos kilómetros al aire libre, ofrecen una mejor amortiguación, sujeción y durabilidad en general.
• Son más adecuadas para correr cuando la situación lo requiere.
• Ofrecen un cierre más seguro. Con un contrafuerte acolchado en el talón y una jaula que abraza el mediopié con cordones, el pie está sujeto con mucha más firmeza.
• Te puedes poner casi todos estos modelos con tus propias plantillas.
• Si eliges un modelo con un upper de cuero, tus pies estarán protegidos cuando los salpiques, tanto de sangre como de otros fluidos corporales. A diferencia de las Crocs, que tienen esos míticos agujeritos y un diseño sin cordones que deja al descubierto la parte de arriba y la de atrás de tus pies.
• Mantienen el pie más fresquito, con un upper de malla o knit y un forro interior textil, a diferencia de los interiores totalmente de espuma de las Crocs.

Las zapatillas para enfermeras tienen que tener una buena amortiguación

Sí, eso lo sabemos, pero..., ¿cuánta amortiguación hay que buscar exactamente? Un estudio realizado entre profesionales de la enfermería concluyó que debe haber 15 mm de "materiales de EVA" en la zona metatarsal y entre 18 y 36 mm de altura del talón.

Es decir, la altura de la suela en el antepié y en el talón, respectivamente.

En nuestro laboratorio, la altura de la suela incluye todas las capas que tienen las zapatillas entre el pie y el suelo (la plantilla, la mediasuela y la suela exterior).

Por eso te recomendamos que te compres unas zapatillas con una suela de al menos 30 mm de altura en el talón, ya que así tus pies y tus piernas estarán bien protegidas durante todo el turno de trabajo. Por lo tanto, la altura de la suela que te recomendamos en el antepié son 20 mm.

Eso sí, ten en cuenta que la cantidad de espuma que tienen unas zapatillas no siempre es totalmente igual a la absorción de impactos que ofrecen. Por eso también hacemos una prueba respaldada por la ciencia (siguiendo el estándar ASTM F1976) para medir con precisión cuánta fuerza puede absorber cada par de zapatillas.

Cuanto mayor sea el resultado en SA, más protección contra impactos puedes esperar. Las zapatillas con al menos 100 SA son perfectas para usar durante todo el día.

En cuanto a la suavidad de la amortiguación, no hay reglas estrictas. Puedes optar por una mediasuela más blanda para sentir que vas pisando nubes, o elegir una más firme que te ofrezca más sujeción (o porque tienes unas patologías del pie que lo requieren).

A ver, tampoco te recomendamos que te vayas a nubelandia para siempre, ya que las espumas mullidas se suelen desgastar más rápido y son menos estables para cuando te pasas muchas horas andando.

Medimos lo blanda que es la espuma de todas las zapatillas que pasan por nuestro laboratorio con un durómetro Shore A. Cuanto más bajo sea el resultado, más mullida es la espuma:

• Blanda: 20 HA o menos.
• Equilibrada: 20-30 HA (recomendada).
• Firme: 30 HA o más.

Ten al menos dos zapatillas en tu rotación (si puede ser)

Cuando la suela exterior o el upper de las zapatillas están desgastados o rotos lo sabes, ¿pero cómo te enteras de que la amortiguación ya no puede más? Es probable que no muestre signos visibles, pero sí que hay cosas que se notan:

• Empiezas a sentir dolor, rozaduras o molestias en zonas de los pies y de las piernas que no te habían molestado antes.
• La mediasuela se ha vuelto más fina en la cara interna y ahora tus pies están inclinados.

Teniendo en cuenta que la mayoría de las zapatillas para correr y caminar duran unos 480-800 km, a lo mejor puedes calcular con la app de pasos del móvil si ya te toca ir cambiándolas.

Por eso, tener al menos dos pares en tu rotación (preferiblemente uno viejo y uno nuevo) ayuda a detectar a tiempo los signos de desgaste de la amortiguación. Otras ventajas de cambiar de zapatillas son:

• La prevención de la fascitis plantar.
• Dejar que las zapatillas descansen y recuperen sus propiedades de amortiguación.
• Saneamiento y mantenimiento.

Que las zapatillas tengan sujeción es imprescindible

Y no, con esto no solo nos referimos a unas zapatillas ortopédicas.

Unas zapatillas con sujeción evitarán que tus pies tengan que trabajar más de la cuenta mientras intentan estabilizar el resto del cuerpo cuando te pasas muchas horas caminando o de pie. Como resultado, terminas menos cansado al final del día.

Además, tampoco querrás sentir inestabilidad o que pierdes el equilibrio cuando ayudas a que un paciente se ponga en pie después de una operación, o si te toca moverlo de la cama a la silla.

Pero, ¿cómo podemos saber que unas zapatillas ofrecen suficiente sujeción?

En nuestro laboratorio, hacemos varias pruebas que nos ayudan a evaluar el nivel de sujeción de cada modelo y a elegir las opciones más estables para las enfermeras. Entre ellas se incluyen las de:

• Rigidez torsional (dificultad para retorcer las zapatillas).
• Rigidez del contrafuerte del talón (nivel de sujeción del talón y del tobillo).
• La anchura de la mediasuela (superficie de apoyo en los aterrizajes).

Una regla sencilla es la siguiente: si puedes retorcer unas zapatillas con las manos como si estuvieses escurriendo una toalla, no tienen la sujeción suficiente como para que te las pongas durante todo el día.

Las tablas que te dejamos aquí abajo tienen las zapatillas con más sujeción que han conseguido llevarse nuestro permiso para que te pases horas caminando y de pie con ellas.

Tienes que tener siempre en cuenta las patologías del pie

Las enfermeras de este estudio están de acuerdo en que la salud de los pies no solo forma parte de la salud general, sino que también es una parte importante del bienestar laboral (e incluso una condición para trabajar en el quirófano).

Pero bueno, que al final descuidar las necesidades de los pies no trae nada bueno, sea como sea.

Los problemas de salud de los pies más frecuentes entre las enfermeras son los siguientes:

• Pies planos y/o sobrepronación.
• Fascitis plantar.

Los pies planos y la pronación excesiva requieren que tus zapatillas ofrezcan una mayor sujeción del arco plantar y estabilidad lateral. También te vendrá bien una amortiguación más firme que haga que los pies no se te tambaleen. Échale un ojo a nuestra guía sobre las zapatillas para pies planos/sobrepronación.

Al igual que los pies planos, la fascitis plantar requiere unas zapatillas estables y de sujeción con una amortiguación más firme y un contrafuerte seguro en el talón. Un modelo adecuado minimizará los micromovimientos y no dejará que el pie baile dentro de las zapatillas para evitar que la fascitis plantar vaya a peor. No te pierdas nuestra guía sobre las zapatillas para la fascitis plantar.

Asegúrate de elegir la talla y el ajuste adecuados

Con la salud de tus pies y el rendimiento laboral en juego, creemos que merece la pena invertir algo de tiempo y esfuerzo en encontrar unas zapatillas que te queden bien.

Esto incluye tener en cuenta tanto la talla (longitud) como el ajuste (anchura).

Talla: Por muy tentador que sea pedir tu talla de siempre y a otra cosa mariposa, nuestra recomendación es que primero midas la longitud de tu pie. ¿Que por qué? Pues porque nuestros pies siguen creciendo y cambiando de forma incluso cuando ya somos adultos, y más si ganamos peso o si nos quedamos embarazadas.

Otra razón es que las marcas tienen diferentes enfoques sobre el tallaje de las zapatillas, y al final saber exactamente cuánto mide tu pie aumenta las posibilidades de pedir la talla correcta.

Ajuste: después de analizar montones de zapatillas en nuestro laboratorio, hemos descubierto que la anchura y la forma de la parte delantera pueden cambiar un montón, incluso dentro de la misma marca.

Por eso te recomendamos que le eches un vistazo a la sección de ajuste de nuestros análisis y reviews antes de comprarte unas zapatillas. También te vamos a dejar por aquí algunas recomendaciones generales:

• Evita los modelos que se estrechan mucho hacia la punta, ya que tus pies aumentan de volumen después de caminar y estar de pie durante varias horas.
• Ve a por unas zapatillas con partes delanteras anchas y redondeadas si tienes pies de anchura media o ancha y/o juanetes (para estos últimos, también recomendamos uppers de knit elástico).
• Si tienes los pies anchos o muy anchos, opta por opciones de anchura ancha o extra ancha (Hoka, Brooks y New Balance sacan muchos de sus modelos en anchuras distintas).

Zapatillas para enfermeras transpirables

Hay que elegir: ¿protegerás a tus pies de que los líquidos les salpiquen o harás que no te suden ni te huelan mal? Al final con una cosa se sacrifica la otra, ya que a las zapatillas de cuero y a los zuecos de espuma siempre les falta ventilación.

Pero si algunos de tus turnos son un poco más "limpios" que otros, creemos que merece la pena que optes por unas zapatillas transpirables con un upper de malla que les de un respiro a tus pies.

Todos los modelos de nuestro laboratorio pasan por varias pruebas que nos indican cómo son de transpirables. Les metemos humo dentro, cortamos el upper y lo ponemos frente a una luz LED para ver si tiene agujeritos, e incluso observamos el material de cerca con nuestro microscopio.

Cuando terminamos, le damos a cada modelo una puntuación del 1 al 5 en transpirabilidad. Hemos reunido los pares más transpirables para las enfermeras, que son los que te ayudarán a controlar el sudor y el mal olor de tus pies al trabajar:

Características especiales de las zapatillas para enfermeras

La resistencia al deslizamiento es una de las características que más buscan las personas que trabajan en hospitales. Los suelos lisos de baldosas y linóleo, junto con los frecuentes derrames de todo tipo de líquidos, son una mezcla peligrosa. Sin embargo, una investigación realizada entre el personal sanitario concluyó que el uso de calzado antideslizante adecuado era más eficaz para reducir los resbalones en el trabajo, sobre todo entre las personas de más edad.

Sin embargo, no hay muchas zapatillas que tengan un certificado oficial antideslizamiento, así que es importante que sepas que el modelo que quieres tiene una suela exterior de longitud completa, ya que esto te asegura cierto nivel de tracción.

Afortunadamente, marcas como Hoka, Brooks y New Balance han ido incorporando más zapatillas antideslizantes confirmadas en sus catálogos. Pero..., ¿cumplen todas ellas con lo que prometen? Esto lo verificamos en nuestra propia prueba de tracción, donde medimos el coeficiente de fricción de cada modelo en el talón (donde es más probable que te resbales).

Nos esperamos un coeficiente de al menos 0,45 para confirmar la capacidad antideslizante de unas zapatillas en los suelos lisos y húmedos de hospitales.

Los zapatillas con un upper de cuero pueden reducir bastante la transpirabilidad, pero ofrecen una protección fantástica contra las salpicaduras de productos químicos y fluidos corporales, además de que son fáciles de limpiar.

Por no hablar de que estos modelos ofrecen más sujeción, duran más y tienen un aspecto más profesional. Suelen venir en colores monocromáticos sencillos para cumplir las estrictas normas del código de vestimenta.

Estas son las zapatillas de piel o cuero para enfermeras mejor valoradas que hemos analizado en el laboratorio:

Marcas populares de zapatillas de deporte con modelos (y descuentos) para enfermeras

Aunque se centran principalmente en las zapatillas de deporte de alto rendimiento, algunas de estas marcas tan conocidas han utilizado sus mejores técnicas de fabricación de calzado para diseñas zapatillas para caminar de alta calidad que les podemos recomendar a las enfermeras. De hecho, unas pocas incluso han diseñado modelos específicamente para enfermeras.