On Cloudmonster: análisis y review

No las dejes escapar si estás buscando:

• Unas zapatillas para entrenar a diario con mucha amortiguación para correr y caminar por asfalto
• Un modelo con mucha protección y rebote para tus carreras de larga distancia entrenando

Si lo que quieres es una pisada cómoda y protectora para los días de recuperación, mejor échale un vistazo a las New Balance 1080 v12.

Y si tienes los pies anchos, podemos decirte por experiencia que tus dedos tendrán espacio para estirarse cómodamente con las Saucony Triumph 21 o con las Nike InfinityRN 4. Además, ambos modelos tienen una amortiguación increíblemente blanda.

¡Con una cantidad monstruosa de amortiguación, parece que On ha hecho su propia versión de las Hoka Bondi! Encontramos muchas similitudes entre las dos zapatillas.

Midiendo la altura de la suela en la zona del talón, nos dio 34,9 mm. Son bastante más altas que los modelos de On Cloud (26,9 mm de media) y también son un poco más altas que la media de las zapatillas que hemos analizado en nuestro laboratorio (33 mm).

Con una altura de la suela de 28,1 mm en el antepié, ¡son 3,5 mm más altas que la media!

Sí que nos hicieron venirnos arriba, ¡literalmente!

Según la marca, las On Cloudmonster tienen un drop de 6 mm.

Basándonos en nuestras propias mediciones, comprobamos que casi es cierto. A nosotros nos da 6,8 mm desde el talón hasta los dedos, así que solamente difieren un poquito.

La plantilla está levemente acolchada, y nuestro calibre marcó un grosor de 3,4 mm.

Sin duda, no son tus típicas zapatillas de running firmes, y creemos que es un gran paso adelante con respecto a las rígidas zapatillas de On del pasado. La marca ha conseguido por fin lo que siempre había prometido que sería la tecnología Cloudtec.

Pero a ver, a ver, tampoco te hagas ilusiones. ¡No son unas zapatillas mullidas!

Cuando quieres ir más despacio, siguen siendo más bien firmes, a pesar de ser la versión de On de las Nike Invincible Run. No te sentirás pisando nubes en tus días de descanso, te lo aseguramos.

Al medir la rigidez de la espuma del talón, nuestro durómetro mostró 25,8 HA. Y, aunque es más blanda que la media de las zapatillas On Cloud (un 21 %, ¡toma ya!), las Cloudmonster siguen estando en la media de las zapatillas de running para asfalto.

Su rocker también te hace sentir que tus pisadas son cómodas y fáciles. Además, moverse hacia delante es facilísimo con ellas, ya que todo el esfuerzo que tendría que venir de nosotros, lo hacen las zapatillas.

A lo largo de nuestra prueba, no dejamos de pensar que estas deben ser las zapatillas de running de On más reactivas hasta la fecha Sus suaves transiciones del talón a la punta del pie se complementan con el rebote, algo poco habitual en las zapatillas maximalistas.

Creemos que para los corredores con pies estrechos o de anchura media, el espacio de su parte delantera es más que suficiente.

Midiendo la zona más ancha de la parte superior, nos dio 97,3 mm, así que está justo en la media de las zapatillas de running de carretera. Sin embargo, el espacio real para los dedos puede ser una decepción para los corredores de pies anchos, ya que este modelo termina un poco en punta, así que se va haciendo más pequeño.

Además, no las tienes en tallas anchas, así que cogerse más talla o probar con otro modelo seguro que te va genial. Te recomendamos las Saucony Triumph 21 o las Nike InfinityRN 4. ¡Ambas son mullidas hasta decir basta!

El contrafuerte del talón, por otra parte, tiene poca o ninguna rigidez. Empujándolo y apretándolo con las manos, le dimos la puntuación más baja posible, un 1 de 5.

Esto se traduce en muy poca sujeción del tobillo en la parte de atrás.

El cuello de estas zapatillas está generosamente acolchado, sujetando bien el tobillo y permitiendo, a su vez, cierta movilidad. Se complementa con una lengüeta reforzada (unida a los laterales) para mantener el pie en su sitio.

Además, sus ojales poco convencionales nos ayudaron a conseguir un cierre perfecto.

Es normal preocuparse por la estabilidad cuando unas zapatillas tienen tanta suela.

Teniendo en cuenta que son neutras, es decir, que no tienen características para guiar los pies, nos parecieron suficientemente estables, sobre todo en las curvas o hacia el final del recorrido.

A esa sensación de estabilidad contribuye la mediasuela firme y moderadamente rígida que tienen. Al evaluar su rigidez lateral en nuestra prueba manual, le dimos un 3 de 5 (donde 5 es la máxima rigidez).

El contrafuerte del talón, por otra parte, tiene poca o ninguna rigidez. Empujándolo y apretándolo con las manos, le dimos la puntuación más baja posible, un 1 de 5.

Esto se traduce en muy poca sujeción del tobillo en la parte de atrás.

Aunque tienen esa suela tan grandota, nunca sufrimos movimientos laterales no deseados. Esto se debe, sobre todo, a la amplia base de este modelo, que hace que puedas pisar con firmeza.

Con un calibre, medimos la anchura de la suela en la parte más ancha del antepié y nos dio 109,0 mm.

En la parte más ancha del talón, nuestro calibre marcó 86,2 mm.

Como vemos, la plataforma de las Cloudmonster no es tan ancha como la media de las zapatillas de running para asfalto, pero sí es lo suficientemente ancha para proporcionar estabilidad.

Con una plataforma tan grande, no es de extrañar que sea rígida.

Medimos cuánta fuerza se necesita para doblar las Cloudmonster en un ángulo de 90 grados, y fueron 34,4 N, un 12 % más de lo que necesitan unas zapatillas para asfalto de media.

De media, las zapatillas con amortiguación máxima pesan 289 gramos o 10,2 onzas en la talla 9 de EE.UU (que suele ser la 42 o 42 y medio de hombre en España). Sin embargo, las Cloudmonster solo pesan 280 gramos o 9,9 onzas a pesar de lo grandes y acolchadas que son.

Esta es una de las razones por las que nos pareció bastante fácil subir el ritmo con ellas.

En cuanto a transpirabilidad, estas zapatillas de running de On no tienen rival. Dejaron que el aire entrase y saliese sin problema incluso en un caluroso día de verano.

Para respaldar nuestra experiencia en la vida real, les hemos hecho una prueba especial de transpirabilidad en el laboratorio. Tras meterles humo dentro, podemos confirmar que han conseguido un 5/5, ¡la puntuación perfecta!

Fíjate en lo fácil que le resulta al humo atravesar el material de la parte superior de estas zapatillas, ¡qué maravilla!

Según nuestra experiencia, la dureza del caucho ayuda a determinar si la suela va a durar o no.

Y viendo lo que nos dice el durómetro sobre las Cloudmonster (78,5 HC), ¡parecen bastante prometedoras!

Con la misma firmeza que la media de las zapatillas de running para asfalto, nos esperamos al menos 480 km de esta suela. Pero, siendo realistas, no podemos asegurarte que vayan a durar más de esos casi 500 km, ya que la espuma de la suela está expuesta.

Otro dato tranquilizador sobre la resistencia de la suela de este par es su grosor.

Usando un calibre, medimos las piezas de caucho que tienen las zapatillas y nos dio 3,7 mm. Están un poco por encima de la media, lo que significa un poco más de caucho para desgastar antes de que sean inutilizables.

El agarre de la suela de las On Cloudmonster es absolutamente increíble para ser unas zapatillas de running para asfalto.

Podemos decirte, alegres y de primera mano, que mantuvieron el agarre en carreteras mojadas, trozos con gravilla suelta, y tierra dura.

La lengüeta de este modelo no tiene prácticamente acolchado. Nuestro calibre marcó solamente 1 mm de grosor en esta parte superior.

Aunque esto nos parece muy útil para conseguir que las zapatillas pesen poco y sean muy transpirables, podría ser un problema para los que son sensibles a los roces de los cordones.

Su aspecto futurista atrae todas las miradas. Si decides presumir de ellas, prepárate para llamar la atención.

No son de lo más asequible, eso está claro.

El precio medio de unas zapatillas maximalistas sonda los 136 euros, y las On Cloudmaster pueden llegar a costar bastante más. ¡No te pierdas nuestras rebajas!