Adidas Runfalcon 3: análisis y review

En nuestra opinión, las Adidas Runfalcon 3 son ideales para:

• Los talonadores que buscan unas zapatillas económicas que rindan bien en tiradas fáciles y de dificultad moderada.
• Los necesitan unas zapatillas que merezcan la pena, sean versátiles, adecuadas para caminar, para salir a correr e incluso para ponérselas con ropa informal.
• Los fans de los modelos anteriores de Adidas Runfalcon que quieren una versión mejorada de ellas pero que les resulte familiar.

Estas zapatillas de running tienen una relación calidad-precio excepcional, aunque no son adecuadas para todo el mundo. En nuestras prueba, comprobamos que su mediasuela podría no ofrecer suficiente amortiguación o que su suela podría no ser lo suficientemente alta para los corredores de antepié o de mediopié.

Por otra parte, creemos que estaría bien que la mediasuela tuviera un poco más de rebote, pero esto es un rasgo común en cualquier par de zapatillas económicas. Estos aspectos concretos tal vez desanimen a los fondistas y a los que buscan unas zapatillas para ritmos rápidos a la hora de elegir este modelo.

Hemos observado el aumento de peso de las Runfalcon 3 en comparación con sus predecesoras.

El talón de las Runfalcon no ha dejado de crecer. Empezó en 26,5 mm (en la 1ª versión), subió a 28,7 mm (en la 2ª) y, ahora, ha superado los 30 mm para situarse en 31,6 mm en la versión 3.

El antepié también ha crecido, pero mucho menos. Con 18,0 mm, es sólo 0,4 mm más alto que la primera versión y 0,2 mm más alto que la segunda. Es evidente que la amortiguación sigue siendo insuficiente y que no está diseñada para los que pisan de antepié o mediopié.

Para quienes busquen unas zapatillas económicas que ofrezcan más amortiguación en el antepié, les sugerimos que consideren las Saucony Axon 2.

Seguramente, la fuerte amortiguación que tienen en el talón y la escasez en de la misma en el antepié conducen a que tengan ese drop tan marcado.

Al medirlas nos dio 13,6 mm, lo que difiere significativamente de la afirmación oficial de Adidas de 9 mm.

Adidas les añade a sus zapatillas una espuma conocida como Cloudfoam. Esta mediasuela a base de EVA, utilizada originalmente en plantillas para mayor comodidad por la marca alemana, ahora también está presente en algunas de sus zapatillas de running.

Medimos lo blandas que son y nos dio 24,3 HA. Esta cifra corresponde a una sensación equilibrada al correr, lo que es bastante estándar para unas zapatillas de running básicas como estas. No son blandas en absoluto, pero tampoco firmes como un ladrillo.

Al exponerla a temperaturas frías, la espuma se endureció, obteniendo un resultado de 30,1 HA, pasando de ser moderadamente firme a totalmente firme.

Aunque este cambio no es ideal, es muy típico para un compuesto basado en EVA, como hemos descrito en nuestra guía avanzada sobre temperaturas y mediasuelas.

Al experimentar una diferencia del 24,2% al pasar de la temperatura ambiente al congelador, las zapatillas de running superan no sólo a la media, sino también a la mayoría de las espumas EVA.

Aunque puede que no sea el mejor resultado en todos los aspectos, sin duda es un buen rendimiento para este tipo de mediasuela.

Al medirlas en el laboratorio nos dieron 269,2 mm, por lo que las RF3 se alinean muy bien con las guías de tallas de Adidas. Afirmamos con seguridad que son unas zapatillas que se ajustan al tallaje real.

La tercera edición de las Runfalcon sigue siendo una opción excelente para nosotros, los corredores con pies más anchos, ya que medimos la parte superior más ancha en 100,4 mm.

Quienes tienen los pies más estrechos podrían buscarse otras zapatillas económicas más ajustadas, como las ASICS Gel Excite 9.

Con una medida de 80,4 mm en la zona del dedo gordo, las Runfalcon 3 tienen espacio de sobra para que se muevan todos los dedos, independientemente de la forma del pie. De hecho, son unas de las zapatillas más anchas que hemos medido en esa zona.

La estabilidad está garantizada con las Runfalcon 3. Como hemos mencionado antes, están hechas a medida para los talonadores. Así que es crucial tener una zona de aterrizaje segura en el talón, y las Runfalcon 3 no decepcionan.

Y una característica útil aquí es la pieza de plástico TPU que rodea el talón, mejorando significativamente la estabilidad de las zapatillas.

Normalmente, la prueba de rigidez a la torsión da como resultado puntuaciones de 1 o 2 en el caso de las zapatillas de uso diario. Sin embargo, en esta ocasión, le hemos dado a las zapatillas una puntuación de 3 sobre 5.

Consideramos que tienen una flexibilidad moderada, aunque no tanta como la media de zapatillas diarias.

Adidas ha optado por un ir a lo seguro con el contrafuerte del talón, al que asignamos una puntuación de rigidez de 2 sobre 5, ligeramente por debajo de la media.

Es cómodamente suave y está generosamente acolchada, proporcionando una amplia sujeción al tendón de Aquiles.

El antepié mide 114,0 mm de ancho con nuestro calibre, lo que proporciona un amplio espacio para aterrizar con seguridad.

Sin embargo, una vez más, donde Adidas se luce es en el talón.

Con una impresionante anchura de 94,8 mm, destaca por ser bastante más ancho que la media de las zapatillas de running, así como las dos versiones precedentes de las Runfalcon.

Descubrimos que sólo necesitábamos 17,7 N de fuerza para doblar las Runfalcon 3 a 90 grados.

Esto las cataloga como unas de las zapatillas más flexibles que hemos puesto a prueba, arrojando luz sobre por qué son tan cómodas para caminar o ir al gimnasio.

Tras una sesión de 20 minutos en el congelador las zapatillas se endurecieron, muy a nuestro pesar.

La fuerza necesaria para doblarlas hasta el mismo punto ascendió a 26,8 N, un aumento notable que no podemos pasar por alto.

Esto representa un aumento del 51,8%, que se queda corto si se compara con la media.

El peso no es una de las principales prioridades de las marcas cuando se trata de zapatillas de running económicas. Esto es evidente en el enfoque de Adidas con las Runfalcon 3.

Con un peso de 283 gramos, pesan más que sus predecesoras, las Runfalcon originales y las Runfalcon 2.0, e incluso superan el peso de unas zapatillas de running normales.

A primera vista, nos pareció que estas zapatillas no iban a presumir de una transpirabilidad fuera de serie, aunque parecía una ligera mejora con respecto a sus predecesoras.

Tras nuestra prueba de humo en el laboratorio, le asignamos una puntuación de 3 sobre 5. Y nos dimos cuenta de que surgía un patrón curioso: las Runfalcon originales obtuvieron un 1 sobre 5, las Runfalcon 2.0 un 2/5, y ahora las 3... ¡un 3/5! Instamos encarecidamente a Adidas a que aspire a un 4 en la próxima versión.

En una inspección más cercana, la malla de Adidas aquí parecía densa. Pero cuando iluminamos las zapatillas, una prueba increíblemente sencilla pero reveladora, se hicieron visibles numerosos orificios de transpirabilidad. Así es como Adidas consiguió mejorar la transpirabilidad con respecto a los dos modelos anteriores.

Sin embargo, no se trata de las típicas perforaciones completas que suelen encontrarse en las zapatillas de running actuales, lo que limita un poco la transpirabilidad.

Y nuestra reveladora prueba del microscopio confirmó decepcionantemente por qué estas zapatillas no ofrecen la transpirabilidad que esperábamos. ¡Resulta que es una malla gruesa y densa!

Por ejemplo, si contrastamos esta imagen con la malla increíblemente transpirable de las Adidas Boston 11, vemos claramente una diferencia asombrosa. Ahora queda bastante claro por qué estas zapatillas no son muy transpirables.

Con una medida de 80,4 mm en la zona del dedo gordo, las Runfalcon 3 tienen espacio de sobra para que se muevan todos los dedos, independientemente de la forma del pie. De hecho, son unas de las zapatillas más anchas que hemos medido en esa zona.

Ya esperábamos un mal rendimiento del talón, puesto que el material es prácticamente el mismo. No obstante, tuvimos que hacerles nuestra prueba con la Dremel, aferrándonos a una pizca de optimismo.

Lamentablemente, el resultado vuelve a ser un desalentador 1 sobre 5. El resultado, en comparación con las ASICS Metaspeed Sky+, es evidente.

Con una dureza de 81,9 HC, Adidas no ha corrido ningún riesgo con la suela.

Este número obtenido con nuestras pruebas de dureza sugiere que nos dará un buen equilibrio entre durabilidad y agarre.

Al principio, temíamos volver a utilizar la Dremel en estas zapatillas. Parecía que las habíamos dañado fácilmente por todas partes.

Sin embargo, en un giro sorprendente, la situación cambió por completo en términos de durabilidad. Adidas, conocida por fabricar algunas de las mejores suelas en el mundo del running, confirmó una vez más lo buena que es su reputación, aunque no están hechas con caucho Continental.

Usamos la Dremel y solamente le hizo una pequeña hendidura de 0,64 mm en la goma, lo cual es una hazaña impresionante dado la dureza (no excesiva) del caucho.

La suela también tiene varias características. Sirven para reducir el peso y aumentar la flexibilidad. Con una buena capa de caucho alrededor de estos recortes, creemos que no debería haber problemas, incluso en grava o senderos fáciles.

El grosor de la suela está por debajo de la media (3 mm), pero no es un problema teniendo en cuenta la notable durabilidad que hemos observado anteriormente.

Una vez más, Adidas nos decepciona con unas zapatillas carentes de elementos reflectantes, lo que sin duda es una decepción.

Es raro encontrar zapatillas de 65 euros con una lengüeta de 8 mm de grosor. Esta característica garantiza un confort superior sobre el empeine, eliminando cualquier posibilidad de roce con los cordones.

Las zapatillas de running económicas suelen tener la lengüeta reforzada, como es el caso. En carreras rápidas, es posible que la lengüeta se mueva un poco. Sin embargo, para carreras fáciles a moderadas, esto no debería ser un problema.

Gracias a su generosa anchura y puesto que no tienen una plantilla pegada, podrás ponerles casi cualquier par de plantillas que quieras.