Nike Air Max 90: análisis y review

¿Por dónde empezar con las Nike Air Max 90? Son unas zapatillas a las que les han dado por todos lados, física y culturalmente, y aún siguen volando de las estanterías. Siguen siendo relevantes, pero tienen la misma maldición que muchas otras zapatillas de prestigio: podrían actualizar su interior y mejorar la experiencia general que ofrecen.

Nike Air Max 90: La historia la escriben las leyendas

Con más de 30 años, uno de los productos más mágicos de la relación Nike/Tinker Hatfield sigue aquí, con nuevos colores y colaboraciones. Tres años después del lanzamiento de las Air Max 1, las primeras en mostrar la increíble cámara de aire, Nike lanzó las 90, que en aquel entonces eran las Air Max III.

Tinker Hatfield acababa de ser nombrado Director Creativo de Diseño de Producto tras su éxito al conseguir que Michael Jordan no se le escapase (por si aún no lo sabes, Hatfield es posiblemente la principal razón por la que Nike es el gigante que es hoy en día). Las Air Max 90 mantuvieron el mismo diseño inspirado en el running y se atrevieron con una cámara de aire incluso mayor. Ese estilo se ha mantenido prácticamente intacto hasta el día de hoy.

Uno de los puntos que más gusta de las Nike Air Max 90 es su precio. Aunque 120 euros (para las versiones básicas) empujan a este par hacia el territorio premium, en realidad es una cantidad comprensible para un par que viene pisando tan fuerte.

Tantas, tantas opciones...

Tomar decisiones puede volverse incluso más complicado con modelos tan fantásticos como este. De hecho, el año pasado salieron las Infrared, que tienen los colores originales y son preciosas. También las hay totalmente en blanco, en negro mate, o las "Bacon", una colaboración con DQM que, ahora mismo, es de las versiones de color más populares.

Les di una oportunidad a las White/Psychic Blue, principalmente porque unas zapatillas blancas combinan con todo, pero también porque me encantan los azules apagados con el detalle "Air Max" en un rojo nítido. Otro punto a favor es que tener un estilo más monocromático ayuda a quitar la complejidad de los 4 o 5 materiales utilizados en las zapatillas. Las Air Max 90 quedan chulísimas puestas y, a ver, elijas el color que elijas, realmente son inconfundibles, porque tienen ese diseño deportivo que casi casi te convence para que corras con ellas (pero no, no lo hagas).

Que las haya en tantos colores es uno de los mayores favores que Nike les ha hecho a sus clientes, ya que hace que cada par se adapte a la persona que se lo compra. Junto con la historia de las Air Max 90, estas zapatillas pueden ser el tema principal de tus conversaciones con cualquier persona a la que le gusten las sneakers. Y, para aquellos que solamente quieren un par chulo, las Air Max 90 también encajan a la perfección.

Rompen su promesa de ser cómodas

Olvidándome por un momento de que soy muy fan de las Air Max, estas zapatillas tienen un problemón. Aunque se ajustan a la talla real y se pegan bien a los pies si utilizas los ojales adicionales, su suela es muy rígida. Esto significa que no se flexionan como la mayoría de las zapatillas de estilo runner y tardan en adaptarse. Me he puesto las Air Max 90 durante 4 días seguidos y todavía me duelen los pies. Además, el ajuste es estrecho, lo que aumenta la presión sobre el pie. He investigado un poco en Internet y al parecer es un problema común.

Han pasado 31 años desde que se lanzaron inicialmente las Air Max 90, y si pueden hacerlo con las Air Force 1, pueden hacerlo con estas también. Incluso parece que se han dado cuenta y están vendiendo pares retro de Air Max III (las mismas zapatillas) con soporte para el arco del pie.

La transpirabilidad vence a la impermeabilidad

Con una parte superior de malla, las Nike Air Max 90 han optado por la transpirabilidad en detrimento de la impermeabilidad. Cualquier filtración de agua por encima de los paneles laterales de cuero llega en dos segundos al interior de la zapatilla. Pero bueno, al menos no hay fugas en la parte inferior.

Como no voy a usar esta versión en invierno, sinceramente me quedo con la transpirabilidad. La verdad es que, en ese sentido, el flujo de aire en el interior se nota y, aunque son estrechas, no he sentido que se me sobrecalentasen los pies.

Deja el cepillo de dientes en el baño, las Air Max 90 pueden con algunas manchas

Al verlas me preocupé inmediatamente por los detalles de ante. Los recuerdos de cuando llevaba un cepillo de dientes y bolsas de plástico para proteger mis zapatillas me persiguen. Afortunadamente, tanto Nike como yo hemos dejado atrás esos días, y con un limpiador normal para el calzado puedes deshacerte tanto de las manchas húmedas como de las secas.

La verdad, esta tiene que ser una de mis cosas favoritas de las zapatillas. Con una clara preferencia por el aspecto sobre la comodidad, el hecho de que las Air Max 90 no sean un imán para las manchas las convierte un par que merece la pena.

Son más resistentes de lo que parecen

El diseño de las Air Max 90 me ha vuelto a dejar flipando. Incluso si hay algunas costuras visibles en el cuero, que parece ser curtido vegetal, aguantan bastante bien.

Después de ponérmelas durante 4 días y usar un taladro eléctrico y un cepillo de alambre, solo se les cayó un poquito de textura de la superficie. No intenté que la cámara de aire explotase porque, ¿para qué?

Conclusión

Casi todo en el diseño de las Air Max 90 apunta a que son unas zapatillas dignas de su lugar en la historia. Bien fabricadas, con materiales de calidad y resistentes a las manchas. Incluso si no te gustan en blanco, hay tantas alternativas que sería difícil no encontrar el par adecuado. Además, no destacan tanto como las 95 o las 97, cosa que, para mí, es un punto a favor. La gente que sabe lo que llevas puesto lo apreciará por lo que es, y tú también deberías hacerlo. Mi único problema es la comodidad, me resulta extraño que Nike no haya dado en el clavo después de tanto tiempo en este mundillo, pero bueno, tal vez algún día.